Europa tiene su propio Caribe y está a al lado de Madrid: es el paraíso de todos los jubilados

Cuando se piensa en playas de aguas templadas, clima templado todo el año y una vida tranquila rodeada de naturaleza, muchos imaginan el Caribe, pero, sin salir de Europa y a poco más de dos horas de avión desde Madrid, existe un destino que reúne todas esas características: Madeira.
Este archipiélago portugués se ha convertido en uno de los lugares preferidos por miles de jubilados europeos. Situado en el océano Atlántico frente a la costa noroeste de África, ofrece un estilo de vida relajado para quienes buscan disfrutar de la jubilación sin renunciar a las comodidades modernas.
Madeira, el Caribe de Europa
@portuvieira 📍🇵🇹Isla de Madeira Aquí te dejo 3 lugares que no puedes dejar de visitar en la Isla de madeira 🇵🇹 📍Punta Do Sol es la región más cálida de la isla de Madeira y posee varias playas importante como Madalena do Mar, Anjos, Lugar de Baixo y Ponta do Sol. La ciudad de Ponta do Sol, la más importante de la región homónima, se encuentra al sur de la isla, entre Ribeira Brava y Calheta, a pocos kilómetros de Funchal. 📍Porto Moniz es una de las ciudades más antiguas de la Isla de Madeira, situada al norte entre el mar y las montañas. Atrae a muchos turistas durante todo el año, sobre todo, por su espectacular patrimonio natural: por las hermosas piscinas naturales que ofrece el mar, pero también por sus levadas por el campo y por el Bosque de Laurisilva, Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO. 📍Miradouro do guindaste ubicado en la parroquia de Faial junto a la playa de Ribeira do Faial y a una altura de 26 metros (85 pies), ofrece una vista impresionante de la costa norte de Madeira, que se extiende desde Faial hasta Ponta de São Lourenço y el Océano Atlántico. #madeira #cristianoronaldo #madeiramadeira #portomoniz #visitmadeira #travel #viajes #portugal #pontadosol #visitmadeira #portomoniz #venezolano #venezolanosenelmundo #portugal🇵🇹 #turismomadeira #viajes #paisajesnaturales ♬ sonido original – PortuVieira
Aunque durante años Madeira ha sido conocida como un destino vacacional, en la última década cada vez más personas, especialmente jubilados procedentes de España, Francia, Alemania y el norte de Europa, deciden establecerse de forma permanente o pasar largas temporadas en la isla. A diferencia de otros destinos masificados, ha sabido crecer sin perder su identidad ni su equilibrio entre turismo y vida local.
Uno de los grandes atractivos de Madeira es el clima. Las temperaturas medias oscilan entre los 18 grados en invierno y los 26 en verano. Además, disfruta de muchos días de sol al año. Pasear junto al mar, practicar senderismo o simplemente sentarse en una terraza a disfrutar del paisaje forma parte de la rutina diaria.
Madeira es conocida como «la isla de la eterna primavera» y no es una exageración. Su origen volcánico y su clima han dado lugar a una vegetación exuberante, con jardines, bosques y montañas que parecen sacados de una postal tropical. La seguridad es otro de los factores que convierten al archipiélago portugués en un destino atractivo para jubilados. La tasa de criminalidad es baja y la convivencia es tranquila. La población local es conocida por su carácter amable y hospitalario.
Coste de vida razonable
Aunque Madeira no es el destino más barato de Europa, su coste de vida es moderado, especialmente si se compara con grandes ciudades españolas o con otros destinos costeros muy demandados. El precio de la vivienda varía según la zona; Funchal, la capital, es la más cara, pero existen municipios más tranquilos y asequibles en el norte y oeste de la isla. La alimentación, el transporte y los servicios básicos mantienen precios razonables, lo que permite vivir con comodidad sin grandes gastos.
Gastronomía y vida social
La gastronomía madeirense es exquisita. El pez espada negro, uno de los más emblemáticos, se sirve habitualmente acompañado de plátano frito o maracuyá, una mezcla de sabores que sorprende y conquista. Entre los platos de carne sobresale la espetada, brochetas de carne de vacuno asadas a la brasa y condimentadas con ajo y laurel. Se acompañan de bolo do caco, un pan tradicional cocido sobre piedra caliente y servido con mantequilla de ajo, imprescindible en cualquier mesa.
Buena conexión con España y Europa
Desde Madrid, Madeira está a poco más de dos horas y media de avión, con conexiones frecuentes. Además, el archipiélago cuenta con buenas comunicaciones internas.
En definitiva, este destino, que alberga playas de ensueño y una naturaleza exuberante no es sólo un lugar bonito para visitar, sino un destino pensado para vivir bien. Su clima, su naturaleza, la seguridad y la cercanía con España la convierten en una alternativa real para quienes sueñan con una jubilación tranquila junto al mar. Sin necesidad de cruzar el Atlántico ni adaptarse a culturas lejanas, este rincón de Europa ofrece un estilo de vida relajado, saludable y accesible que se asemeja al de cualquier isla del Caribe.