Javier Torrox bucea en los primeros diez años de reinado de Felipe VI y su defensa de la unidad de España
"Ninguna Monarquía puede sobrevivir a su honor"
«Ante esta situación de extrema gravedad, que requiere el firme compromiso de todos con los intereses generales, es responsabilidad de los legítimos poderes del Estado asegurar el orden constitucional y el normal funcionamiento de las instituciones». Estas palabras, extraídas de su mensaje del 3 de octubre, son las más importantes que ha pronunciado Felipe VI. Así lo asegura el periodista y traductor Javier Torrox en el libro que acaba de publicar, Palabra de Rey (Amazon, 2024). La obra es la historia de los primeros diez años de reinado de Felipe. El hilo conductor de la narración son los más de 700 discursos realizados por el monarca a lo largo de esta década.
No es un repaso cronológico de los hechos, sino que, en un notable logro de concisión, da cuenta de las cuestiones más importantes y polémicas mediante su exposición en grandes temas. El más relevante tuvo lugar a los tres años de su ascenso al trono. La rebelión de la Generalidad de Cataluña en 2017, no sólo puso en juego la integridad de España, también la supervivencia de la Corona. Torrox sostiene que el monarca hizo valer su honor en este trance para salvar la situación.
El autor, de hecho, encaramado a los hombros de Montesquieu, apunta que el honor del Rey es el motor de la Monarquía: su principio, su medio y su fin –en los dos sentidos de esta expresión, el de propósito y el de una eventual terminación–. Si hizo uso de su honor para espolear a «los legítimos poderes del Estado» para que cumplieran con sus obligaciones constitucionales en 2017, sólo la honra de su conducta política podrá salvar a la Corona de «la terrible paradoja» en la que se ve inmerso y arrastrado por el ordenamiento vigente: la unidad de España o su quiebra mediante la pluralidad de naciones y estados –la federalización– a la que tiende de forma inexorable el desarrollo de la Constitución de 1978. «Ninguna Monarquía puede sobrevivir a su honor», concluye Torrox acerca del futuro de la institución.
La obra no olvida que la proclamación de Felipe como Rey fue el resultado de la abdicación de su padre. Escudriña el programa moral que presentó ante las Cortes para distinguirse de Juan Carlos y también analiza las relaciones entre ambos tras las revelaciones de OKDIARIO acerca del patrimonio del emérito en el extranjero.
El autor dedica una especial atención a las relaciones internacionales –la acción política esencial, según apunta–, que comienzan con la América española, continúan con la correspondencia con el vecino Marruecos –cuya hostilidad expone– y sigue con las visitas a España de terceras potencias y los viajes que ha realizado el monarca. Torrox finaliza su análisis del concierto de las naciones con una minuciosa descripción de lo que llama «global–socialismo» y que identifica con programas como la Agenda 2030 de la ONU y la proliferación del relato pseudocientífico que diagnostica problemas imaginarios de magnitud global para los que los global–socialistas exigen acciones de igual envergadura.
A estos relatos los llama «geoideologías» en tanto que son presentados como asuntos que afectan a todo el planeta. Señala al Foro Económico Mundial como la gran agencia de publicidad que organiza eventos para poner en contacto a los susceptibles de ser corrompidos con sus potenciales corruptores. La corrupción final se traduce en acciones políticas basadas en pretextos tan racionales como el neomilenarismo: el fin del mundo a causa de un inminente apocalipsis climático o futuras epidemias de nuevas enfermedades –¿guerra biológica?– que esta organización ve en su bola de cristal. Torrox demuestra cómo las geoideologías de los global–socialistas se han infiltrado en los discursos del Rey.
Estos diez primeros años de reinado de Felipe han sido enormemente accidentados. El autor da cuenta de la acumulación de investiduras, de legislaturas fallidas y de la epidemia de coronavirus. Dedica también su atención a la actividad de las Fuerzas Armadas, cuyo mando supremo corresponde a la Corona, y al mayor legado que España le ha dado al mundo: «el español, lengua universal». Finalmente presenta unas conclusiones sobre cuál es el estado actual de la institución monárquica y especula sobre su futuro en función de sus propias decisiones en la tesitura política en la que se encuentra y que, según Torrox, le obligará a elegir entre la unidad de España o el proceso federalizante al que se dirige el actual ordenamiento a toda velocidad.
El constante uso de citas de los discursos del Rey para presentar los hechos de esta década presta a la narración una agilidad extraordinaria. El autor divierte también al lector con unos originales remates históricos con los que finaliza cada capítulo en conexión con algún asunto tratado en él. Incluye una exhaustiva cronología con los principales hitos y acontecimientos de la primera década de Felipe VI.
Con Palabra de Rey, Torrox completa una trilogía que comenzó con Golpe a la Nación (Ed. Manuscritos, 2019) y continuó con Federalismo cacique (Amazon, 2023). De estas tres obras resulta un retrato de la España contemporánea basado en el relato periodístico de los acontecimientos bajo el prisma de un gélido realismo.