¿Qué es una nube de polvo cósmico y cómo se forma?

El Universo es un lugar donde se forma gran cantidad de polvo cósmico, como resultado de pequeñas partículas de material sólido que flota en el espacio entre las estrellas. Este polvo es muy importante, ya que se encuentra alrededor de las estrellas jóvenes y es el que las ayuda a formarse. También es la materia prima a partir de la cual se forman planetas, como la Tierra.

El polvo cósmico comienza su ciclo en las estrellas, que es donde se forma y luego sale por acción de un viento suave, hacia una explosión masiva de estrellas. Después se renueva en las nubes de gas entre ellas las estrellas y parte de él se agota cuando comienza a formarse una nueva generación de estrellas. Este polvo solía considerarse por los astrónomos como un obstáculo para visualizar ciertos objetos, porque absorbe la luz. Pero luego se comprobó que esto no es así, ya que una nube de polvo cósmico refleja una luz plateada.

¿La nube de polvo cósmico puede esparcir los ingredientes de la vida?

Una nube de polvo cósmico en un principio se pensaba que absorbía la luz visible de los objetos, no pudiéndose observarlos en los clásicos telescopios ópticos. Esto hacía que el Universo se vea mucho más oscuro y no se puedan observar muchos elementos interesantes del espacio.

Cuando los científicos comenzaron a usar cámaras infrarrojas, revelaron que la nube de polvo cósmico era en realidad muy interesante para futuros descubrimientos astronómicos. El polvo transforma la luz de las estrellas absorbida en longitudes de onda más largas, de esta forma se puede apreciar el brillo utilizando instrumentos especiales sensibles al infrarrojo lejano.

Cerca del planeta Marte

Herschel está diseñado para captar estas grandes longitudes de onda y poder ver el brillo plateado del polvo cósmico a temperaturas entre 8 y 100K. La NASA informó recientemente que una nube de polvo cósmico rodeaba a Marte muy por encima de su atmósfera. Los autores del estudio descartaron al propio Marte y sus lunas Fobos y Deimos como fuentes del polvo y concluyeron que debe provenir de una nube de polvo más grande que flota entre los planetas de nuestro sistema solar.

Este “polvo interplanetario” es de gran importancia. Se piensa que fue primordial en la formación y evolución de nuestro sistema solar e incluso es posible que haya proporcionado agua a nuestro planeta e impulsado la vida.

Como todos los espacios vacíos se llenan de polvo, lo mismo sucede con el cosmos. Este polvo cósmico que está formado por pequeñísimas partículas de minerales, en el rango de tamaño nanométrico y micrométrico (una milmillonésima y una millonésima de metro, respectivamente) se encuentran entre el final de la vida de una estrella y el comienzo de la formación de un nuevo sistema solar.

¿Cómo se forma y cuál es su función?

Una estrella se forma a partir de la ruptura de una nube de polvo cósmico, formada por helio e hidrógeno, elementos que se crearon posteriores al Big Bang. Las estrellas usan este hidrógeno como combustible, formando elementos más pesados como el carbono y el oxígeno y hasta el elemento hierro, mediante procesos de fusión nuclear.

Estos recientes elementos se expulsan al final de la vida de una estrella, cuando colapsa bajo su propia gravedad y explota como una supernova. Las altas energías de esta explosión forman elementos adicionales más pesados que el hierro, que se combinan con el oxígeno para formar minerales. Esto es precisamente el polvo cósmico.

A partir de la desintegración de una nube de gas de helio e hidrógeno mezclada con polvo, se formó nuestro sistema solar. De otra forma no habría planetas rocosos como la Tierra y Marte. Al estar formada la Tierra por elementos tan pesados como oro, plomo, o uranio (todos más pesados que el hierro) demuestra que nuestro Sol es una estrella de tercera generación o superior. Cuya procedencia es de al menos una explosión de supernova de otra estrella cercana.

Partículas de polvo en el espacio

Estas partículas interestelares que son anteriores a nuestro sistema solar, pueden suministrar información sobre los procesos hacia el final de la vida de las estrellas más antiguas. La nube de polvo cósmico del sistema solar interior, contiene algunas partículas de polvo interestelar. Pero la mayoría de las partículas de polvo interplanetario de nuestro sistema solar son liberadas por los cometas cuando se acercan al Sol o por la destrucción de asteroides.

Por lo tanto, contiene información sobre la composición y formación de “proto-planetas” que se observan como los primeros pasos del origen de planetas, a partir de la gran nube de polvo cósmico y gas que rodea a una nueva estrella.

Esta nube de polvo de nuestro sistema solar, se mueve lentamente hacia el Sol, cuya atracción gravitacional actúa como gigantesca aspiradora. En este camino algunas de las partículas del polvo chocan con Marte y con la Tierra.