Hallazgo espeluznante: científicos descubren una nueva especie depredadora a casi 8.000 metros de profundidad
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Muchos hemos cometido el gran error de pensar que ya lo sabemos todo sobre la Tierra, pero por muy espectaculares que son los hallazgo de los científicos en el espacio, todavía queda mucho por descubrir en nuestro planeta.
Por ejemplo, todavía hay muchos datos que desconocemos de nuestros océanos y no tenemos la tecnología necesaria para explorar los lugares más profundos de la Tierra.
Por ello, no debería sorprendernos que las nuevas investigaciones científicas sirvan para encontrar especies desconocidas, y con la capacidad para cambiar todo lo que sabemos sobre las profundidades marinas.
En esta ocasión, han sido los científicos del Instituto Oceanográfico Woods Hole (WHOI) y del Instituto Milenio de Oceanografía (IMO) de la Universidad de Concepción los que han identificado una nueva especie de crustáceo depredador en la Fosa de Atacama.
El hallazgo se ha producido a casi 8.000 metros de profundidad y ha sido publicado en la revista Systematics and Biodiversity, y rápidamente ha dado la vuelta al mundo porque demuestra la biodiversidad única de las profundidades oceánicas.
Los científicos descubren un nuevo depredador en la Fosa de Atacama
La Fosa de Atacama, situada frente a las costas de Perú y Chile, es una de las regiones más profundas del océano, alcanzando profundidades de hasta 8.065 metros.
En un entorno extremo, los científicos se han sorprendido al descubrir a Dulcibella camanchaca, un anfípodo de aproximadamente cuatro centímetros de longitud.
A diferencia de otros animales de su especie, que suelen ser carroñeros, se trata de un depredador activo. Por increíble que parezca, utiliza sus apéndices especializados para capturar presas más pequeñas en la oscuridad total de las profundidades.
El nombre científico que han escogido los científicos no es fruto de la casualidad. Camancha es la palabra que utilizan muchos pueblos andinos para referirse a la oscuridad. Es decir, es una mención directa a las condiciones de la fosa y un homenaje a la región.
La metodología de los científicos para investigar las fosas
El hallazgo se realizó en 2023 gracias a la colaboración del Instituto Milenio de Oceanografía y del Instituto Oceanográfico Woods Hole. Además, han necesitado utilizar el buque de investigación Abate Molina, una donación de Japón a Chile.
Mediante el vehículo no tripulado pudieron utilizan trampas cebadas para recolectar especímenes en el fondo marino. Gracias a ello, capturaron cuatro individuos de Dulcibella camanchaca.
Posteriormente, los especímenes fueron congelados para su conservación y sometidos a análisis genómicos en la Universidad de Concepción.
Los datos de ADN y estudios morfológicos confirmaron que esta especie no sólo es nueva, sino que también representa un nuevo género dentro de la familia Eusiridae, subrayando la singularidad evolutiva de este crustáceo.
¿Por qué el nuevo hallazgo en Chile ha sido tan importante?
La importancia de este nuevo hallazgo radica en que el descubrimiento de Dulcibella camanchaca amplía el conocimiento sobre la biodiversidad en las zonas hadales y proporciona información muy valiosa sobre cómo la vida se adapta a condiciones extremas de presión, temperatura y ausencia de luz.
Además, este crustáceo es el primer anfípodo depredador de gran tamaño identificado en profundidades tan extremas, lo que redefine la comprensión de las estrategias alimentarias en estos entornos.