Aragonés sacará a los Mossos a la calle para controlar el pasaporte Covid
El Govern teme la avalancha de jóvenes franceses tras el cierre del ocio nocturno en Francia
Cerca de 3.000 personas se manifiestan en Barcelona contra el uso del pasaporte Covid
La Generalitat suspende la obligatoriedad del pasaporte COVID al saturarse las descargas
Pere Aragonés sacará a los Mossos d’Esquadra a la calle para comprobar el cumplimiento del uso del pasaporte Covid. La detección de fraude para acceder a los establecimientos donde es obligatoria su presentación (bares, restaurantes, gimnasios y residencias) ha encendido las alarmas en el Palau de la Generalitat. Además, según fuentes gubernamentales, no todos los locales cumplen la norma de solicitar el certificado. Este fin de semana miles de personas se manifestaron en Barcelona contra el uso del pasaporte Covid.
Desde su entrada en vigor hace un par de semanas, el Govern ha detectado que muchas personas no vacunadas usan pasaportes falsos o de terceras personas para poder acceder a los locales. Hay incluso, según fuentes de la Consejería de Salud, «mercado negro de códigos QR». Por eso, Aragonés quiere que sean los Mossos los que controlen la autenticidad del documento y el portador y, en caso de detectar dicho fraude, puedan ser sancionados por falsedad documental.
Otra de las preocupaciones de las autoridades sanitarias catalanas, que ven cómo día tras día la incidencia y la ocupación de camas hospitalarias crece sin control, es la flexibilidad de bares, restaurantes y locales a la hora de solicitar el documento. En la mayoría de casos únicamente comprueban que el código QR sea válido, sin pedir el DNI para cotejar si es de la persona que lo presenta, y en otros incluso permiten la entrada al establecimiento sin tan siquiera solicitar el pasaporte.
A partir de ahora todo esto cambiará. La posibilidad de que agentes de los Mossos uniformados o de paisano puedan pedir el documento en el interior de los locales obligará a los propietarios a ponerse las pilas. De no hacerlo se juegan multas cuantiosas. El objetivo de la Generalitat con esta medida, tras obligar a mostrar el DNI junto al pasaporte que no se está cumpliendo, es garantizar que de cara a las fiestas navideñas la incidencia no se dispara hasta el punto de obligar a tomar nuevas medidas restrictivas.
Miedo a los jóvenes franceses
La Generalitat pone la mirada en la frontera entre España y Francia por La Junquera. El cierre de todo el ocio nocturno en el país vecino por un período de cuatro semanas, incluyendo celebraciones tan importantes como Nochebuena o Nochevieja, hace temer que miles de jóvenes franceses opten por recorrer los escasos 200 kilómetros que hay desde las principales ciudades del sur de Francia hasta Cataluña para gozar de la fiesta que les prohíbe Emmanuel Macron.
En el gabinete de Pere Aragonés hay miedo a que estos ciudadanos del país vecino, donde la vacunación no sigue al mismo ritmo que en España, puedan traer problemas a la noche catalana. En primer lugar, porque muchos no disponen del certificado de vacunación obligatorio para acceder a las discotecas catalanas, lo que podría generar incidentes cuando se les niegue la entrada. Además, en el caso de acudir a fiestas privadas, como ocurrió hace unos meses, hay una alta probabilidad de que sean portadores del virus.