Cataluña estrena el toque de queda y la mascarilla al aire libre entre la resignación, el enfado y el asombro
Cataluña es la primera región que recupera el toque de queda en España para tratar de frenar la sexta ola
El TSJ de Cataluña avala el toque de queda, reducir aforos y limitar reuniones
Indignados por el cierre del ocio nocturno en Cataluña: «Ojalá tuviéramos aquí una Ayuso»
Primera noche de toque de queda en Cataluña de la segunda etapa. Tras casi medio año sin restricciones de la movilidad nocturna, con la llegada de la sexta ola, Pere Aragonés ha optado por impedir la libre circulación de personas de 1.00 a 6.00 de la madrugada para frenar el ascenso de contagios. OKDIARIO ha salido a las calles de Barcelona en esta primera noche de aplicación del toque de queda para conocer la opinión de los ciudadanos.
La medida es acogida con una mezcla de resignación, enfado y asombro. Como lo es también la obligatoriedad de la mascarilla en exteriores. De hecho media, hora después de la entrada en vigor del Real Decreto Ley, que aprobó este jueves el Consejo de Ministros, muchos ciudadanos no eran conscientes de que tenían que llevar la protección facial tapando nariz y boca aunque caminaran solos por la acera.
«Me parece una locura que en el resto de España no existan estas restricciones y aquí sí; menos, cuando no tienen un criterio científico», explica a este periódico un italiano residente en Barcelona. Otra ciudadana, sin embargo, defiende la restricción de la movilidad nocturna por culpa de la situación actual. «Es una medida necesaria en estos momentos en que los casos están más altos» explica.
Aunque el toque de queda catalán es, de momento, el único que se ha recuperado en toda España, otras comunidades sopesan seguir los pasos de Cataluña. Es el caso de las Islas Canarias, según han explicado esta misma tarde desde el Gobierno canario. Tras limitar el horario de apertura de los locales hasta la 1.00 de la madrugada, el gabinete de Ángel Víctor Torres estudia el cierre total del ocio nocturno y el decreto de un toque de queda avalado por la Justicia.
En Cataluña, las medidas que ha avalado este mismo jueves el Tribunal Superior de Justicia, con la Fiscalía en contra, estarán en vigor durante catorce días. Tras esas dos semanas el Govern de Aragonés, analizada de nuevo la situación, decidirá si pide una prórroga o si pone fin a ellas para volver a la normalidad de hace tan solo unas horas. El apoyo de los tribunales a la propuesta del gobierno catalán, de hecho, es lo que abre la puerta a que otras autonomías que temían un portazo de sus TSJ planeen ahora recuperar algunas de las restricciones más duras con las que España luchó contra las primeras olas de la pandemia.