Podemos enchufa en Palma a cuatro meses de las elecciones al gestor de redes sociales de Belarra

Nunca es tarde para colocar a un alto cargo para el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Palma presidido por el socialista, José Hila, y a cuatro meses para poner fin a la presente legislatura con la celebración de las próximas elecciones municipales del 28 de mayo, Podemos enchufa al que durante cinco años ha estado dedicado a llevar las redes sociales de la ministra de esta formación, Ione Belarra, en el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 de España: Guido Ohlenschlaeger Gómez.

A sus 29 años, este es el único trabajo que ha desempeñado el que ya es director general de Calidad y Población, adscrito al Área de Justicia Social, feminismo y LGTBI que dirige el también portavoz del gobierno municipal, Alberto Jarabo (Podemos), cuya pareja, la diputada en el Congreso, Lucía Muñoz, es la cabeza de lista de este partido al Ayuntamiento de Palma.

Todo hace indicar que el aterrizaje en la capital balear desde Madrid de este nuevo directivo de Podemos que se embolsará más de 3.000 euros mensuales, lleva la firma de Muñoz, y está muy estrechamente ligado a la inminente campaña electoral.

Sin experiencia laboral alguna en la empresa privada, ni como autónomo, empresario o trabajador por cuenta ajena, Guido Ohlenschlaeger, cuenta con un diploma de especialización en marketing online (2015) y un máster en estudios avanzados en comunicación política en la Universidad Complutense de Madrid.

De catalán no tiene ni idea, ni título alguno, pese a que el alcalde socialista Hila se lo exige a todos los trabajadores municipales, incluidos barrenderos y chóferes de la EMT, pero se ve que a los cargos colocados a dedo no les hace falta tener certificado alguno en esta lengua.

También al no cumplir Guido Ohlenschlaeger los requisitos exigidos en la legislación vigente para ocupar la plaza de director general, directamente el alcalde Hila exime de su puño y letra la plaza que ocupará este nuevo directivo de sus socios de Podemos, de esos condicionantes.

Legalmente ese puesto tendría que ser ocupado por personal funcionario de carrera del Estado, de las comunidades autónomas, de las entidades locales o con habilitación de carácter nacional, que pertenezcan a cuerpos o escalas clasificados en el subgrupo A1, de acuerdo con lo establecido en el artículo 47 del Reglamento orgánico del gobierno y administración del Ayuntamiento de Palma.

Con nada de ello cumple el nuevo directivo de Podemos en Palma, al igual que muchos otros altos cargos municipales, cuyas plazas también han quedado exentas de esa obligación legal por obra y gracia de la decisión del alcalde Hila.

Una forma de proceder que tendría que excepcional, pero que en el actual gobierno municipal se ha convertido en norma habitual, para poder colocar así a más de medio centenar de altos cargos, entre ellos, nada menos que hasta 25 directores generales.

Aunque nadie lo controlará, tendrá una jornada laboral será de 40 horas semanales este alto cargo que afirma en su escueto currículo, que en los estudios que hizo en la Universidad Complutense sobre comunicación política, «complementé los conocimientos prácticos sobre el entorno digital, con conocimientos teóricos enfocados a la transformación social», si bien no especifica con qué objetivo.