Fin a la crisis de Vox Baleares: Idoia Ribas sigue de portavoz y no se descartan cambios en la dirección

El comunicado de la dirección nacional de Vox evita avalar a Patricia de las Heras como presidenta del partido

El grupo parlamentario sale reforzado tras limarse las asperezas entre los cinco rebeldes y la dirección

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Miquel Ángel Font

El acuerdo con la dirección nacional que ha puesto fin a la crisis de Vox en Baleares mantiene a Idoia Ribas como portavoz a pesar de haber liderado la revuelta del lunes de la pasada semana que concluyó con la expulsión de Gabriel Le Senne y de Patricia de las Heras del grupo parlamentario. Con el acuerdo, el grupo sale reforzado una vez se han limado las asperezas entre los cinco rebeldes y la dirección nacional del partido. Lo que no está claro es cómo queda la dirección en Baleares. La realidad es que no se descartan cambios.

El grupo de los cinco rebeldes viene insistiendo desde hace meses en un cambio en la dirección de Vox, y en la reunión de este jueves con una delegación de la secretaría general ha vuelto a insistir en el tema. Del comunicado emitido por la dirección nacional de Vox sobre el fin de la crisis en Baleares, resulta llamativo que no haya ninguna referencia al reconocimiento del liderazgo de Patricia de las Heras.

Tras la remodelación del Comité Ejecutivo de Vox realizado antes de las elecciones, Jorge Campos, ahora diputado en el Congreso, abandonó la presidencia del partido y en su lugar fue designada Patricia de las Heras. Posteriormente Fulgencio Coll fue nombrado vicepresidente del partido.

El grupo de los hasta ahora cinco rebeldes de Vox ha estado enfrentado desde el principio de legislatura con la dirección nacional del partido que preside Santiago Abascal y, en consecuencia, enfrentado a Patricia de las Heras.

A la postre, este enfrentamiento es lo que originó el lunes de la pasada semana el estallido de la crisis de Vox. La dirección nacional del partido ha perdonado ahora a los cinco rebeldes y el grupo parlamentario se mantiene intacto. Lo que no se sabe es si la dirección sigue confiando en Patricia de las Heras.

De hecho, el comunicado de la dirección de Vox hace referencia a que la crisis en Baleares «se ha visto amplificada por algunas filtraciones interesadas». Es una clara referencia al supuesto informe que elaboró en junio Patricia de las Heras contra Jorge Campos y que ha sido filtrado de forma anónima en plena crisis.

El comunicado de la dirección nacional avala a Gabriel Le Senne como presidente del Parlament balear, pero no hace referencia alguna a la figura de Patricia de las Heras como presidenta del partido.

Més ve una «tregua» más que un cierre

El portavoz de Més per Mallorca en el Parlament balear, Lluís Apesteguia, ve una «tregua» más que un cierre en la crisis de Vox, ya que los acontecimientos han dejado patente un problema interno de «odios viscerales» entre sus miembros, y eso «existe, está ahí y estallará tarde o temprano».

Así ha comentado Apesteguia, en declaraciones a Europa Press, el anuncio del partido dando por terminada la crisis tras alcanzar un acuerdo con los diputados rebeldes.

Para el coordinador de los nacionalistas, la crisis interna en Vox no termina sino que «pasa a una fase de disimulo». En cualquier caso, Apesteguia ha puntualizado que a Més no le «interesan lo más mínimo» las dinámicas internas de Vox, salvo que les «debiliten».

Lo que sí les preocupa, ha añadido, es «la imagen que se transmite de las instituciones» y la «inestabilidad», así como el hecho de que la presidenta del Govern, Marga Prohens, «siga manteniendo su apuesta por tener a estas personas como socios prioritarios». «Si son capaces de hacerse todo lo que se están haciendo entre ellos, ¿qué no harán con el resto?», ha advertido Apesteguia.

Por ello, el diputado de Més se ha mostrado convencido de que viven «una tregua», pero «seguro que esta crisis continúa, porque es constante».

Propuesta contra el transfuguismo

Al margen de ello, Més mantendrá su propuesta de reforma del reglamento del Parlament para combatir el transfuguismo. Su texto, registrado con carácter urgente tras el estallido de la crisis de Vox, replica lo que ya establece la Ley de Bases del Régimen Local para los ayuntamientos y Consells, y permitiría actuar para que los diputados expulsados de sus partidos pasen a ser no adscritos.

«La mantendremos, porque independientemente de que se produjera en un marco concreto, es una reforma que es adecuada», ha subrayado Apesteguia.

Para salir adelante, la reforma necesitará del apoyo o del PP o de Vox. El presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, mostró públicamente su apoyo a la propuesta en mitad de la crisis, mientras que los diputados díscolos hicieron lo contrario; y el PP no se ha posicionado de momento, ni en público ni en privado, según Apesteguia.

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