La princesa Leonor tras los pasos de su padre el Rey Felipe: ya es Hija Adoptiva de Zaragoza

Ya es una realidad, la princesa Leonor es Hija Adoptiva de Zaragoza. El nombramiento de Hija Adoptiva de Zaragoza, es uno de los broches de oro con el que la ciudad ha querido honrar a la princesa Leonor en su paso por la ciudad.

La  concesión del título ha sido por mayoría absoluta, en la que sólo dos concejales de ultra izquierda de corte marxista, Zaragoza en Común (ZEC), han votado en contra, en el pleno celebrado este jueves en el Ayuntamiento de Zaragoza.

La idea de nombrar a la princesa Leonor como Hija Adoptiva de Zaragoza nació el día que cumplió la mayoría de edad, el pasado 31 de octubre. Fue en ese momento cuando la alcaldesa de Zaragoza, la popular Natalia Chueca, anunció su voluntad de que la princesa recibiera este título honorífico.

Un día muy emotivo además porque fue en un ambiente festivo, coincidiendo con su jura de la Constitución, un rito protocolario en el que la princesa brilló por distinguida templanza y sencillez, como futura heredera al trono de España, y por la que Zaragoza decidió iluminar sus fuentes con los colores de la bandera nacional.

Además, la jura de la Constitución se había producido semanas antes de que la princesa jurase bandera en la Academia General Militar, el pasado 7 de octubre.

Rey Felipe, Hijo Adoptivo de Zaragoza

En este caso, Leonor también seguirá los pasos de su padre, el Rey Felipe VI. El título de Hija Adoptiva de Zaragoza a Leonor es una concesión que también fue otorgado al Rey Felipe, siendo príncipe, días antes de terminar su estancia en la Academia General Militar. Algo que invita a pensar que Leonor recibirá la distinción, justo antes de terminar su formación en la academia, previsiblemente este próximo mes de mayo, cuando se le podrá ver en el Ayuntamiento de Zaragoza para recoger la distinción y firmar en el Libro de Oro.

Don Felipe recibió el título de Hijo Adoptivo de Zaragoza el 5 de mayo de 1986, siendo por aquel entonces alcalde el socialista Antonio González Triviño. Tras ser nombrado Hijo Adoptivo, don Felipe dejó para la inmortalidad plasmada su firma en el Libro de Oro de la ciudad una emotiva dedicatoria: «Al Ayuntamiento de Zaragoza, en el día de mi nombramiento como Hijo Predilecto de la Ciudad, con mi más profundo agradecimiento y afecto», añadiendo que siempre llevaría «con orgullo este nombramiento que a tanto me obliga».

👑 Frente a los que atacan la Monarquía por ser símbolo de la unidad de España, hoy más que nunca: viva la Princesa Leonor, viva el Rey y viva España. Comparto columna de opinión vía @okdiariohttps://t.co/ayMKxyQeV7

— Patricia Sanz (@patriciasanz_89) October 31, 2023

Y así ha sido. En estos meses en los cuales la princesa Leonor ha pasado en Zaragoza el mayor tiempo, el Rey Felipe ha visitado la ciudad en varias ocasiones, como uno más. Recordamos, por ejemplo, la visita sorpresa que don Felipe hizo a su primogénita en septiembre, al poco de ingresar en la Academia General Militar.

En esa ocasión, el Rey escogió el céntrico restaurante de Tajo Bajo, para reunirse en la clásica comida anual que hace con sus amigos. El monarca abandonó el restaurante, no sin antes dejar un bonito recuerdo para Tajo Bajo. Don Felipe inmortalizó su visita en un plato de porcelana, que seguro pondrá a buen recaudo el chef, donde el rey firmó:»Saludos a todos en Tajo Bajo con todo Afecto».

Leonor, Hija Adoptiva de Zaragoza

Aquella visita de don Felipe a Leonor, coincidió con una semana muy importante en la formación de la princesa. La futura heredera acaba de recibir el sable de oficiales, rito simbólico en el que los cadetes de primer año lo reciben de manos de los alumnos de segundo curso, y que les acompañará a lo largo de toda su carrera. La ceremonia contó con la presencia de los altos mandos del Ejército de Tierra, sin la asistencia de familiares, por lo que el monarca decidió no acudir al desear que la princesa sea tratada como «un cadete más».

El objeto de esta distinción, recogida en el Reglamento de Protocolo, Ceremonial, Honores y Distinciones del Ayuntamiento de Zaragoza, es la de reconocer a las personas que hayan destacado por sus méritos o cualidades, especialmente en el ámbito cultural, científico, social, artístico, político o económico, o por los servicios prestados en beneficio de la ciudad.

Auditorio Princesa Leonor

La estancia de la princesa Leonor en Zaragoza será recordada con cariño por los zaragozanos, quienes también quisieron en el mes de noviembre rebautizar el Auditorio de Zaragoza con su nombre, ‘princesa Leonor’, de la misma manera que el Ayuntamiento nombró al Pabellón ‘príncipe Felipe’, en honor a su padre a su paso por la ciudad.

Si bien, hay que recordar que en esta ocasión, de forma inaudita, el grupo municipal del PSOE se abstuvo, argumentando que «no tenía importancia», y que los de ZEC votaron, como era de esperar, en contra.

La visita a la Virgen

Como es sabido, la Reina Letizia evita que sus hijas reciban una instrucción católica, por lo que la ofrenda floral a la Virgen del Pilar que hicieron los cadetes a la que se sumó voluntariamente la heredera al trono vestida de militar, fue acogida con gran expectación y cariño por los zaragozanos, que aquella tarde del seis de octubre, congregó a un buen número de curiosos que veían por primera vez en público a la princesa.

En esta ocasión, fue la Casa Real la encargada de organizar el acto de la ofrenda de flores, debido a la participación de la princesa.

Estos zaragozanos pudieron ser testigos de la entrada de la futura Reina de España al templo de la Basílica de la Virgen del Pilar, por primera vez, con motivo de la tradicional ofrenda que los cadetes hacen a los pies de la Virgen, para invocarle protección, en la víspera de la Jura de Bandera.

La princesa llegó sonriente hasta la plaza, donde ha podido sentir el calor de la gente que estaba esperando su llegada. Una estampa que se repetirá dentro de poco, cuando Leonor vuelva a la plaza del Pilar para hacer suyo el distinguido nombramiento en el Ayuntamiento de Zaragoza.