Velarde (Podemos) llama «zánganos» a quienes estudian carreras privadas: «Os ponía yo a trabajar»
Martina Velarde, líder de Podemos Andalucía y con prácticamente toda su vida laboral unida a la política, ha cargado a través de sus redes sociales contra quienes estudian «carreras privadas». «Os ponía yo a trabajar desde cero, zánganos», exclama una Velarde cuyo único cometido pasaba por hacer crecer a Podemos Andalucía, y fue incapaz de entregar la documentación a tiempo para que pudieran presentarse a las elecciones. Finalmente, Podemos Andalucía ha desaparecido por completo del Parlamento autonómico. Sin embargo, Velarde se cree con la potestad de dar lecciones.
«Qué quemaera que quienes curramos desde los 18 años, pagándonos todo y echando los higadillos tengamos que oír a vagos a los que les pagan carreras privadas y les ponen negocios y coches, hablando de la cultura del esfuerzo. Os ponía yo a trabajar desde 0, zánganos», ha señalado en sus redes sociales Martina Velarde, que se embolsa 90.000 euros al año como diputada en el Congreso pese a no ser capaz ni de entregar la documentación de su partido a tiempo. Una mujer a quien le regalamos todos los españoles 90.000 euros al año dando lecciones a los españoles que le pagan.
Qué quemaera que quienes curramos desde los 18 años, pagándonos todo y echando los higadillos tengamos que oír a vagos a los que les pagan carreras privadas y les ponen negocios y coches, hablando de la cultura del esfuerzo. Os ponía yo a trabajar desde 0, zánganos
— Martina Velarde (@MartinaVelardeG) January 15, 2023
Velarde, máxima responsable de que Podemos haya desaparecido en Andalucía, nos tiene más que acostumbrados a sus insultos y salidas de tono. Recientemente, fue respondida en redes sociales por decenas de usuarios tras afirmar que España necesitaba tener al menos cuatro ministerios de Igualdad. Lo hace, la mujer, en un momento en el que su Gobierno ha beneficiado penitenciariamente a 185 delincuentes sexuales. Sin pudor alguno, Velarde es capaz de alabar la Ley Montero.
Y es que sus redes sociales están repletas de este tipo de comentarios sin sentido. Eso, y decenas de insultos a sus rivales políticos, ante los que ella misma se ve incapaz de debatir con argumentos. Por ello, el insulto es su santo y seña.