Inmigración ilegal

Los falsos menas marroquíes de Melilla sabían de la «sobrecarga del sistema» y lograban asilo en 30 días

centro de menores Melilla La Purísima
Un agente de la Guardia Civil frente al centro de menores La Purísima, en Melilla (GC).
David García de Lomana

Los inmigrantes marroquíes mayores de edad que se hacían pasar por menores extranjeros no acompañados (menas) para salir de Melilla y llegar a la península eran «perfectamente conocedores» de que sus solicitudes serían admitidas a trámite en apenas 30 días «debido a la sobrecarga del sistema». Y así fue: la operación de la Policía Nacional concluyó con la detención de 40 de ellos, asentados ya en diferentes puntos de la geografía española (Bilbao, Gerona, Zaragoza, Valencia, Almería, Málaga y Algeciras). Los agentes buscan aún a otros 24 inmigrantes fugados.

El portavoz policial que ha detallado la investigación ha apuntado que los arrestados iban perfeccionando el engaño, sabedores de las rendijas que ofrece la legislación, para colarse en la península de forma rápida.

La Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (Ucrif) de la Jefatura Superior de Policía de Melilla empezó a tirar de la manta a inicios de 2022, alertados por la Policía Local y por trabajadores del centro de menores La Purísima, que habían detectado la presencia de varios inmigrantes marroquíes mayores de edad inscritos como menas.

El engaño comenzaba cuando los inmigrantes eran interceptados en la vía pública, normalmente de madrugada, por la Policía Local. Los marroquíes manifestaban ser menores y automáticamente eran trasladados a La Purísima. Cuando el personal del centro tramitaba su alta, decían tener 17 años sin aportar ningún documento acreditativo. No hacía falta. Desde ese momento se les dispensaba tratamiento de mena, a lo que sigue el correspondiente expediente de protección del menor por parte de la Consejería de Políticas Sociales.

Después, y según ha explicado el portavoz de la Ucrif en Melilla, los inmigrantes no dejaban que se les practicaran las pertinentes pruebas médicas de determinación de la edad. Una vez formalizado su ingreso en el centro, acudían a la oficina de asilo, en el puesto fronterizo de Beni Enzar, para solicitarA de forma fraudulenta protección internacional. Ahí sí, aportaban su pasaporte original.

Admitida la solicitud y realizados todos los trámites, sólo tenían que esperar 30 días para abandonar Melilla rumbo a la península en calidad de solicitantes de asilo. Durante ese tiempo, se beneficiaban de la acogida y de los recursos de alojamiento y mantenimiento ofrecidos en La Purísima por el Gobierno de Melilla, con el consiguiente gasto público reservado para los verdaderos menas.

Tras las gestiones de la Ucrif con la dirección del centro de menores, la Consejería de Políticas Sociales y personal de la Oficina de Asilo y Refugio (OAR), la Policía Nacional ha constatado hasta la fecha un total de 64 casos de marroquíes adultos beneficiados de la protección internacional a inmigrantes menores de edad. Además de los 40 detenidos en Melilla, pesan órdenes de búsqueda y detención sobre otros 24 sospechosos, todas ellas por presuntos delitos de falsedad documental.

La investigación se ha extendido durante más de un año dada la complejidad que supone el cotejo documental requerido y el estudio fisonómico de los encartados, según ha indicado el portavoz policial. La causa judicial ha quedado en manos del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 3 de Melilla.

Lo último en España

Últimas noticias