Vehículos giroscópicos ¿el transporte del futuro?
¿Cómo te imaginas el transporte urbano del futuro? Para muchos, en un futuro no muy lejano, los automóviles eléctricos de pequeñas dimensiones, las bicicletas eléctricas, los vehículos autónomos y el alquiler de vehículos con sistemas como Car2Go ya pueden cambiar de manera radical el modo en que nos movemos por la ciudad. Sin embargo, el inventor Dahir Semenov tiene un interesante idea basada en el uso de vehículos giroscópicos, que podrían circular haciendo equilibrio sobre el tráfico rodado, evitando las congestiones y usando pistas metálicas sobre el asfalto, que se supone les proporcionarán además la energía necesaria.
Los vehículos giroscópicos no necesitan más que una o dos ruedas, en lugar de cuatro y podrían circular a una altura superior gracias a un elemento que gira en su interior y que hace que mantenga el equilibrio como si se tratase de una peonza. El concepto de Dahir Semenov es cuando menos vistoso, e imagina además vehículos que pueden circular a distintas alturas por encima de los automóviles e incluso por encima de los peatones, aunque cuesta imaginar cómo se evitaría que más pronto que tarde hubiese una colisión con las ruedas de estos autobuses giroscópicos (en principio parece que irían sobre la línea central de la calzada para encontrarse los menos obstáculos posibles).
El vídeo de concepto muestra el principio en el que se basan los “autobuses” y explica que podrían crearse transportes públicos como un autobús o tranvía y también para servir como espaciosos vehículos de lujo que sustituyan a las limusinas.
Además de este curioso transporte giroscópico, el vídeo muestra otro concepto más futurista todavía de vehículo de emergencias que incluye un sistema de hélices para elevarse como un dron y servir de grúa para los bomberos. Dentro de este dron podrían ir subidos dos bomberos con sistemas de extinción o incluso servir como para rescatar a personas en peligro en balcones o ventanas.
Seguramente, poner en práctica estos conceptos es mucho más complicado de lo que parece mostrar el vídeo y sobre todo, cuesta pensar que alguien pueda estar tranquilo con un gigantesco autobús que pasa por encima de vehículos o incluso peatones haciendo equilibrio, por muy seguro que sea el sistema. En cualquier caso, no sería de extrañar que alguien esté dispuesto a probar el invento, al menos en forma de prototipo, para explorar si realmente puede tener un día aplicación práctica.