El juez reabre el caso y llama a declarar al sospechoso de los crímenes de los ancianos de Guanarteme
Doce años después de los crímenes de Guanarteme. La familia de Ana María Artiles y Antonio Quesada, verá sentado en el banquillo al único sospechoso de los asesinatos de los dos ancianos. Tras reabrir el caso hace unas semanas gracias al empuje y el trabajo de la familia de las víctimas, ahora el juez ha dado el primer paso y llama a declarar por el doble crimen al subdirector de la sucursal bancaria de las víctimas, al deducirse de lo actuado «la posible comisión de un delito de asesinato».
El caso contra el subdirector de la sucursal del barrio de Guanarteme se sobreseyó en el año 2023 por falta de pruebas. Tras ordenar la Audiencia Provincial de Las Palmas de Gran Canaria la reapertura del caso y las nuevas diligencias propuestas por la familia, ahora el juez instructor deduce la posible comisión del delito de asesinato y llama a declarar al sospechoso.
Patricia Catalina, la letrada que representa a la familia de los ancianos asesinados, no disimula su satisfacción tras conseguir que se reabriera el caso en una primera instancia y ahora que se llame a declarar al único sospechoso: «Estamos inmensamente felices por la reapertura del procedimiento y además por los trámites de tribunal del jurado por los dos delitos de asesinato agravado que podrían ser castigados con Prisión Permanente Revisable por cada uno de ellos. La Audiencia Provincial de Las Palmas nos ha dado la razón y está claro que existen indicios más que suficientes para continuar la instrucción contra el único investigado por los asesinatos de Antonio y Ana María, así como por un presunto delito de estafa contra el matrimonio, móvil más que probable para cometer los crímenes de una forma violenta y cruel».
El sospechoso
La última vez que se vio con vida a Antonio Quesada y Ana María Artiles fue en marzo del año 2012 y estaban en compañía del principal investigado: el subdirector de su sucursal bancaria de confianza en Las Palmas de Gran Canaria. El hombre que gestionaba el dinero y el patrimonio de los dos ancianos de 76 y 74 años.
Los dos ancianos tuvieron una cita con el subdirector cuando la oficina estaba cerrada al resto del público. Exactamente a las 18:32 horas de ese día las cámaras graban como el matrimonio y el subdirector salían juntos del banco. Ya nunca se les volvería a ver con vida.
El 20 de agosto de 2017 un cazador encontró los huesos del matrimonio enterrados en el Barranco de las Vacas, en la localidad de Agüimes. En 2018 la Policía detuvo al subdirector del banco tras descubrir que estafaba a los clientes con un perfil similar al del matrimonio asesinado, hechos por los que fue despedido de la sucursal.
El relato del sospechoso no cuadró con los datos extraídos de su teléfono móvil. Sus declaraciones se llenaron de contradicciones. Tras varios días en prisión provisional, el juez le soltó por falta de pruebas y le mantuvo investigado hasta junio de 2023, momento en que sobreseyó provisionalmente la investigación contra el subdirector y decretó el archivo de la causa.