Atención emocional en las residencias de mayores: cuidar también lo que no se ve

Cada día cuidamos nuestra alimentación, nuestra piel, nuestra salud; sin embargo, en algunas ocasiones descuidamos lo intangible, aquello que no podemos ver. Todos necesitamos que nos cuiden en algún momento de nuestras vidas, sobre todo cuando nos llega alguna enfermedad inesperada o comenzamos a tener una edad en la que necesitamos ayuda constante en nuestro día a día tanto para cuidarnos por fuera y por dentro.

Y no se trata, desde luego, de ninguna irrealidad, más aún cuando la sociedad, sobre todo los más vulnerables de la misma, ha atravesado una de las pandemias más graves del S. XXI. De hecho, según el Informe de Envejecimiento en Red del CSIC, más del 80% de las más de 400.000 personas mayores que viven en residencias, uno de los colectivos que más ha notado la crisis sanitaria, sufren condiciones crónicas complejas y avanzadas; hasta un 60% padecen demencia y, además, existe una alta prevalencia de necesidades psicosociales y espirituales difícilmente atendidas, la mayoría vinculadas a la soledad y la pobreza que la pandemia ha dejado al descubierto.

Ante este complicado escenario, la Fundación ”la Caixa” ha ampliado su Programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas a residencias de personas mayores con el fin de mejorar la calidad de vida de las personas que se encuentran en un proceso de enfermedad avanzada y a sus familiares. En este momento, este proyecto se desarrolla en 113 residencias de toda España. Desde que el programa empezó este nuevo recorrido hace unos meses, ya han sido atendidas 2.761 personas: 1.722 residentes y 1.039 familiares.

Cuidado de residentes y familiares

El residente es atendido, de forma individual o grupal, basadas en la escucha activa y la empatía; la expresión de emociones y sentimientos; el acompañamiento en su sentir espiritual; la adaptación progresiva a la enfermedad, y el valorar un acompañamiento voluntario al final de la vida.

La atención a los familiares abarca el apoyo que necesitan para poder atender a sus seres queridos, y el acompañamiento, la prevención y el tratamiento del duelo. La atención a los profesionales de las residencias también es un factor clave para el bienestar de los residentes y sus familiares.

En este sentido, el Programa facilita apoyo en situaciones de burnout, ansiedad y malestar; espacios para expresar y reflexionar sobre casos especialmente complejos; aportación de técnicas y recursos en las distintas áreas de atención: soledad, final de vida y duelo.

El duelo de Rocío y Arancha 

Pero, además de esta última acción en residencias, el Programa para la Atención Integral con Enfermedades Avanzadas de la Fundación ”la Caixa”, que ha sido pionero en España, también brinda atención emocional, social y espiritual en los cuidados paliativos y procesos de final de vida y duelo.   

Arancha y Rocío Espejo, dos hermanas que perdieron a su madre en apenas dos años tras diagnosticarle un tumor cerebral, fueron acompañadas en la despedida por Olga, una de las psicólogas especializada en duelo del Hospital San Rafael de Madrid, uno de los centros donde actúa el programa de Fundación ”la Caixa”. “Cuando mi madre murió nuestra vida cambió drásticamente”, explican. Por ello, prosiguen, “recibir ayuda psicológica de un equipo tan profesional como ha sido nuestro caso, al menos para nosotras, ha sido fundamental”.

Las hermanas reconocen, además, que la llegada de Olga a sus vidas ha sido “luz y guía” porque “cuando tienes al lado a un especialista en duelo eres capaz de celebrar la vida después de haber conocido la muerte. Apareció en el momento crucial como el ángel que necesitábamos en ese momento porque eran los últimos días de vida de mi madre”.

Para ellas, detallan, a partir de esta pérdida tan importante “tuvimos que aprender a vivir sin ella y con su ausencia”. Eso sí, para ello, han tenido que hacer un trabajo de “gestión importante para interpretar todas las emociones que te van surgiendo. Y la verdad es que puedes, a partir de esto, crear una versión de ti mismo que puede, quizás, gustarte un poco más”.

Finalmente, reflexionan sobre la vida y sobre la muerte, y llegan a la conclusión de que “muchas veces no sabemos hacer algo tan rutinario como es vivir, ¡cómo vamos a saber morir! Por ello, que esté ahí una persona tan profesional guiándote en el camino es una ayuda que ojalá todo el mundo pudiera recibir”.

Alrededor de 500.000 personas atendidas

El Programa para la Atención Integral con Enfermedades Avanzadas de la Fundación ”la Caixa” cuenta en este momento con 44 Equipos de Atención Psicosocial (EAPS) que pertenecen a entidades sociales y sociosanitarias de reconocido prestigio en este ámbito en sus respectivas comunidades autónomas.

Dichos EAPS están formados por más de 230 psicólogos/as, trabajadores/as sociales, enfermeros/as, médicos, agentes pastorales, y más de 1.000 personas voluntarias y actúan en 132 hospitales de toda España y 133 unidades de apoyo domiciliario.

Desde que naciera la iniciativa, los profesionales del programa han atendido a alrededor de 500.000 personas. Concretamente, más de 200.000 pacientes y más de 300.000 familiares.