La horchata está bien, pero hay un refresco mejor para que los mayores de 65 años combatan el calor en verano

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Con la subida de las temperaturas, la hidratación se convierte en un asunto clave para preservar la salud, sobre todo entre las personas mayores. Aunque la horchata es una bebida popular y refrescante, hay una alternativa que está ganando popularidad y que podría ofrecer mayores beneficios para quienes tienen más de 65 años.
Se trata de una opción que calma la sed y que apoya el bienestar digestivo y metabólico, algo fundamental para este grupo de edad durante los meses de más calor.
El refresco que pueden tomar los mayores para mantenerse hidratados en verano
El agua con gas ha incrementado en los últimos años su consumo en España. Su efecto efervescente, causado por el dióxido de carbono, estimula el sistema digestivo y puede favorecer una sensación de saciedad, ayudando a controlar el apetito y el peso.
Su consumo está muy extendido en países del centro de Europa, pero en España aún sigue creciendo a medida que la población conoce sus numerosas propiedades.
Existen distintos tipos, desde aguas naturalmente gasificadas, hasta aquellas a las que se les añade el gas posteriormente. Estas diferencias influyen en su sabor y en la experiencia al beberlas, y permiten elegir la más adecuada según las necesidades personales.
Beneficios del agua con gas para las personas mayores
Entre sus ventajas más valoradas está la mejora de la digestión, según informan los expertos de Cuídate Plus. El gas carbónico actúa estimulando la producción de jugos gástricos, facilitando que las comidas, incluso las más pesadas, se procesen con mayor rapidez y sin molestias.
Esto es especialmente importante para las personas mayores, quienes suelen experimentar digestiones más lentas o problemas como acidez o reflujo.
Además, esta bebida genera una ligera presión en el estómago, ayuda a controlar el apetito, un aspecto clave para mantener un peso saludable en esta etapa de la vida.
Investigaciones recientes indican que su consumo habitual puede incluso asociarse a una reducción del riesgo de enfermedades metabólicas como la diabetes y la obesidad, frecuentes en la tercera edad.
Por qué el agua con gas es mejor que otras bebidas tradicionales
A diferencia de refrescos azucarados o bebidas con alto contenido calórico, esta opción es prácticamente tan hidratante como el agua natural, pero con el plus de minerales esenciales como calcio, magnesio y bicarbonato.
Estos componentes contribuyen a la salud ósea y cardiovascular, aspectos que deben cuidarse especialmente después de los 65 años.
Aunque algunas personas temen que produzca gases o hinchazón, su efecto depende mucho del metabolismo individual. En general, no genera gases adicionales, aunque puede provocar cierta sensación de llenura.
Por ello, quienes tienen trastornos digestivos específicos o problemas respiratorios deben consultar con un profesional antes de incorporar este refresco a la dieta habitual.
Consejos para disfrutar el agua con gas y aprovechar sus beneficios
Para sacar el máximo provecho, se recomienda consumirla preferentemente antes o durante las comidas, pues potencia su efecto saciante y mejora la digestión. También es una excelente alternativa para quienes buscan reducir el consumo de bebidas azucaradas o edulcoradas durante el día.
En cuanto a su sabor, combina muy bien con diferentes alimentos y se adapta a diversas preparaciones, desde maridajes con pescados y mariscos hasta cócteles ligeros y postres. Su versatilidad la convierte en un refresco ideal para acompañar las comidas de los meses cálidos.