Dr. Jesús de la Fuente: «En los hombres, la prevalencia del VPH es mayor que en las mujeres»

"Si una persona se vacuna frente al VPH antes de tener las primeras relaciones sexuales de su vida, el beneficio es máximo"

"No podemos predecir qué persona contagiada controlará el virus o acabará desarrollando esas enfermedades"

"El VPH es la infección de transmisión sexual más frecuente que existe"

"Desde el momento en el que una persona inicia las relaciones sexuales puede tener contacto con el VPH"

Virus del Papiloma Humano VPH
El doctor, Jesús de la Fuente.
Diego Buenosvinos
  • Diego Buenosvinos
  • Especialista en periodismo de Salud en OKDIARIO; responsable de Comunicación y Prensa en el Colegio de Enfermería de León. Antes, redactor jefe en la Crónica el Mundo de León y colaborador en Onda Cero. Distinguido con la medalla de oro de la Diputación de León por la información y dedicación a la provincia y autor de libros como 'El arte de cuidar'.

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El virus del papiloma humano (VPH) es la infección de transmisión sexual más común entre individuos sexualmente activos, se estima que hay 660 millones de personas infectadas en el mundo por este virus. Esta infección se relaciona con aproximadamente el 100% del cáncer escamoso anal, aproximadamente el 78% del cáncer de vagina, el 25% del cáncer de vulva y aproximadamente el 90% de las verrugas genitales. Pero es que, además, el VPH se relaciona casi en su totalidad con el 100% de los casos de cánceres de cuello de útero. 

Esta realidad, que durante años quizá y por el estigma social, ha quedado relegada en comparación con otros tipos de tumores, se ha vuelto a presentar como muy peligrosa y con la necesidad de ampliar al máximo la cobertura vacunal. Una cobertura que actualmente y dentro del calendario de las comunidades se encuentra en datos próximos al 90%. Sin embargo, se recomienda también a los adultos, que se vacunen como prevención, ya que sólo el preservativo no sirve para frenar este virus. En este sentido, entrevistamos en OKSALUD, al doctor Jesús de la Fuente, coordinador de la Unidad de Patología de Tracto Genital Inferior-VPH del Hospital Infanta Leonor de Madrid y actual secretario de la Asociación Española de Patología Cervical y Colposcopia (AEPCC).

Pregunta.- Le he oído decir doctor, que el Virus del Papiloma Humano no entiende de género ni de orientación sexual, ¿por qué?

Respuesta.- El virus del papiloma humano (VPH) no es exclusivo de un género ni de una orientación sexual. Todas las personas que tengan, hayan tenido o vayan a tener relaciones sexuales se pueden infectar por el VPH. Es por ello por lo que la infección por el VPH es la infección de transmisión sexual más frecuente que existe y las enfermedades que este virus produce pueden aparecer en mujeres, en hombres y en cualquier otro género que se considere; de igual modo, esas enfermedades pueden aparecen en personas que tienen relaciones homo y/o heterosexuales.

Algo parecido pasa con la edad. Desde el momento en el que una persona inicia las relaciones sexuales puede tener contacto con el VPH y, desde ese momento, no existe ninguna edad en la que el riesgo de infectarte por el VPH sea cero. Hay edades de mayor riesgo y edades de menor riesgo. Se estima que la prevalencia del VPH (cantidad de personas que están infectadas por el VPH en un momento determinado) entre los 20 y los 30 años de edad es del 30% en mujeres y del 40% en hombres (cifras aproximadas), mientras que esa prevalencia a los 50 años de edad es del 8 10% en mujeres y del 40% en hombres. Es un hecho comprobado que en los hombres, la prevalencia del VPH es mayor que en las mujeres y que esa prevalencia se mantiene constante a lo largo de su vida. Pero insisto, una vez que una persona inicia las relaciones sexuales, no existe una edad en la que el riesgo de infectarse por el VPH sea cero.

P.- Se habla de muchos virus, pero en este caso, es especialmente peligroso debido a que el 80% de las personas contraerán el VPH en algún momento de su vida. 

R.- Es verdad que, a pesar de esa cifra tan elevada de contagio, la mayor parte de las veces el sistema inmune del organismo, el que nos protege y defiende de las infecciones, es capaz de controlar la infección y “aquí no ha pasado nada”.

Dicho de otra forma, no todo contagio se va a seguir obligatoriamente de enfermedad. Sin embargo, y este es el problema, esta lucha entre el VPH y el sistema inmune tiene lugar cada vez que una persona se infecta por el virus. Y, ojo con esto, porque esa situación puede pasar varias veces a lo largo de nuestra vida sexual (y no necesariamente por un cambio de pareja), de tal forma que puede llegar un momento, por varios motivos, que nuestro sistema inmune no sea capaz de controlar la infección y como dice el refrán “tanto va el cántaro a la fuente que acaba por romperse”, es decir, se acaba generando un problema serio de salud.

Existe otro problema añadido. No podemos predecir qué persona contagiada controlará el virus o acabará desarrollando esas enfermedades. Sabemos que hay personas con mayor riesgo de no controlar la infección; por ejemplo, personas con un sistema inmune debilitado (inmunosuprimidas) o fumadoras, pero, aun así, no podemos predecir lo que he comentado. Por eso, necesitamos estrategias que prevengan la infección del VPH de forma global, que protejan a todas las personas en riesgo y, en este sentido, la vacunación frente al VPH es la mejor herramienta de la que disponemos para prevenir esta infección.

Lo que si podemos predecir son los sentimientos que va a experimentar una persona cuando recibe este mensaje en consulta “tienes el VPH”. Son los siguientes: enfado, sentimientos depresivos, ansiedad, vergüenza y culpa. Y esto también es consecuencia del VPH.

P.- Sin embargo, hasta no hace mucho tiempo, se hablaba de este virus como si sólo afectase a las mujeres, y ese desconocimiento, lleva a que los hombres no conozcan su alta incidencia entre los varones.

R.- Efectivamente. Y este es uno de los muchos mitos o falsas creencias que acompañan a la infección por el VPH. Este virus empezó a conocerse por la afectación que produce en el cuello del útero de las mujeres (también llamado cérvix) y, creo que es por eso por lo que sucede lo que has comentado en la pregunta. Sin embargo, desde hace ya muchos años, sabemos que el VPH puede afectar a todas las zonas que contactan en una relación sexual, porque toda zona que contacte puede resultar infectada; en concreto, el cuello del útero, la vagina, la vulva, el ano, el pene y la orofaringe (cavidad oral y garganta). Zonas, insisto que no son exclusivas de las mujeres. Es muy necesario desterrar este mito y dejar claro que la infección por el VPH no es exclusiva de las mujeres porque, aparte de concienciar al resto de géneros para que tomen las medidas preventivas oportunas para evitar la infección, el asociar el VPH solo con las mujeres puede poner sobre ellas gran parte, o incluso la totalidad, de la responsabilidad de su prevención y esto, desde mi punto de vista, es injusto con las mujeres. El VPH es responsabilidad de todas y de todos.

P.- El calendario vacunal incluye a los niños desde 2022, pero también es recomendable que se vacunen los adultos y ciertos grupos poblacionales. 

R.-La vacunación frente al VPH es recomendable para todas aquellas personas que, como decía anteriormente, están en riesgo de infectarse por el virus y, en ese sentido, debe ser una vacunación universal, sin distinción de género.

Todas las personas que se vacunen frente al VPH, tengan la edad que tengan, van a obtener un beneficio. En mayor o en menor medida, pero siempre un beneficio.

Si una persona se vacuna frente al VPH antes de tener las primeras relaciones sexuales de su vida, el beneficio es máximo; por ello es tan importante que las personas en su adolescencia temprana (10-12 años) y de cualquier género, se vacunen frente al VPH. Y de hecho está vacunación en el periodo adolescente está financiada por nuestro Sistema Nacional de Salud (SNS).

De igual modo, las personas adultas que se vacunen frente al VPH también van a obtener un beneficio. Si una persona adulta no ha iniciado sus relaciones sexuales y se vacuna frente al VPH, el beneficio es el mismo que si se hubiera vacunado en la adolescencia; en este sentido la clave no es la edad. Y si estas personas adultas ya han iniciado sus relaciones sexuales, e incluso si ya han tenido contacto con el VPH, van a obtener un beneficio también muy importante, porque la vacuna frente al VPH les va a proteger de todos aquellos VPH con los que no han contactado previamente y porque, además, en el caso concreto de las mujeres adultas, la vacunación frente al VPH es un complemento necesario e imprescindible a las pruebas que para detectar de forma precoz el cáncer de cérvix, estas mujeres se deben realizar. Son las pruebas de cribado. En resumen, nunca es tarde para vacunarse frente al VPH porque siempre se va a obtener un beneficio.

Por último, mencionar que la vacunación frente al VPH está financiada por nuestro SNS (hasta distintos rangos de edad) en grupos de población en los que el virus puede producir más daño y es por esto por lo que estos grupos de población deben también vacunarse frente al VPH. Serían: 1) personas en situación de prostitución (hasta los 25 años), 2) hombres que tienen sexo con hombres (hasta los 25 años), 3) personas con Síndrome WHIM (hasta los 45 años), 4) personas con trasplante de órgano sólido o de progenitores hematopoyéticos (hasta los 45 años) y 5) mujeres que han recibido cualquier tratamiento por una lesión (un daño) de alto grado en el cérvix. En este último grupo no hay límite de edad. Creo que, en este sentido, conviene aclarar que el hecho de que una vacuna no esté financiada no significa que no esté recomendada y, por ello, debemos no dejar de recomendar la vacunación frente al VPH en aquellas personas que no se pueden beneficiar de la financiación ofrecida por nuestro SNS.

P.-Hoy día se puede detectar el cáncer de cérvix a través de cribados, pero es un virus peligroso, porque es silencioso.  

R.- En esta pregunta hay dos mensajes importantes. El primero está relacionado con el cribado. Sólo existe cribado para el cáncer de cérvix. Para el resto de los cánceres que puede producir el VPH no existe esta posibilidad y, por lo tanto, para el resto de los cánceres la herramienta preventiva fundamental es la vacunación frente al VPH y no podemos dejar de usarla.

El otro mensaje tiene que ver con el silencio del VPH. Me gusta mucho como lo has llamado porque, efectivamente, es un virus que casi no produce síntomas. A excepción de las verrugas genitales o condilomas (lesiones visibles), no hay otra forma de saber a simple vista si tenemos o no la infección. Para eso estarían las pruebas de cribado. Esta casi ausencia de síntomas es uno de los factores que contribuye a que el VPH sea la infección de transmisión sexual más frecuente que existe. Porque puedes pasar la infección o contraerla sin darte cuenta.

P.- ¿Es cierto que el preservativo no es suficiente para frenar la infección?

R.- El preservativo es un método excelente para prevenir las infecciones de transmisión sexual y debemos recomendar su uso correcto. En el caso del VPH el preservativo es un buen método de protección. Es necesario usarlo, pero existen varios motivos por los que el preservativo no ofrece una protección total para evitar el contagio por el VPH. Uno de ellos es el uso incorrecto que se hace del mismo. Datos extraídos de una encuesta publicada en 2018 sobre métodos anticonceptivos en España (realizada por la Sociedad Española de Contracepción) muestran que el 38% de las mujeres que utilizan el preservativo no lo hacen en todas sus relaciones sexuales. Y el 29% lo utiliza después de que la relación se haya iniciado.

Otro de los motivos por los que el preservativo no ofrece esa protección total es porque el preservativo no es capaz de cubrir todas las zonas que contactan en una relación sexual, sino zonas concretas y en momentos concretos. Por todo ello no podemos dejar el peso de la prevención de la infección por el VPH en el preservativo. Tenemos que recurrir a este método pero es necesario usar otras medidas como la vacunación frente al VPH.

P.- En la actualidad, ¿qué tratamientos tienen estos cánceres derivados del papiloma?

R.- Al igual que ocurre con otro tipo de cánceres, cuanto antes se diagnostique un cáncer producido por el VPH menos agresivo será el tratamiento, menores serán las secuelas derivadas del mismo y las probabilidades de sobrevivir al cáncer serán mayores.

Una de las principales secuelas que tiene el cáncer de cérvix es la capacidad de anular las posibilidades de ser madre de las pacientes que lo sufren. Sobre todo, si ese cáncer ya está avanzado. Y no podemos olvidar que el cáncer de cérvix en España es el cuarto cáncer más frecuente en las mujeres hasta los 44 años. Mujeres en plena edad reproductiva.

Y al igual que ocurre con otro tipo de cánceres los tratamientos disponibles para los cánceres producidos por el VPH consisten en intervenciones quirúrgicas (de mayor o menor envergadura), quimioterapia, radioterapia y desde hace pocos años, inmunoterapia. Destacar que la llegada de la inmunoterapia al tratamiento del cáncer de cérvix, en concreto, ha supuesto una mejora importante tanto en la respuesta al tratamiento como en la mejora de la supervivencia de la enfermedad.

P.- Finalmente, se ha creado una asociación para abordar esta patología en Madrid, ¿nos podría hablar de ella y qué objetivos tiene?

R.- En el año 2016 se constituye la Asociación HPV Madrid. Surge de la necesidad de abordar la infección por el VPH desde un punto de vista multidisciplinar. Es una asociación de profesionales sanitarios sin ánimo de lucro y abierta a todo aquel profesional que de alguna manera esté relacionado con la infección VPH y desee participar en la misma y compartir los objetivos de esta. Estos son promover y facilitar la investigación, la formación de profesionales, la educación sanitaria de la población y asesorar a las autoridades sanitarias y medios de comunicación en todos los aspectos relacionados con el VPH, desde un punto de vista multidisciplinar. Entre sus miembros figuran especialistas de varias disciplinas médicas (Ginecología y Obstetricia, Dermatología, Medicina de Familia, Infectología, Coloproctología, Urología, Otorrinolaringología, Pediatría, Anatomía Patología, Medicina Preventiva, y otras más) y de otras disciplinas sanitarias como, por ejemplo, Enfermería, Matronas, Farmacia y otras.

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