Valladolid en fase 1 y su alcalde de desfase

Valladolid en fase 1 y su alcalde de desfase
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Mientras el coronavirus vuelve a cebarse con España y la crisis económica se agudiza, el alcalde de Valladolid y portavoz de la Ejecutiva Federal del PSOE, Óscar Puente, descansa a cuerpo de rey. Es la metáfora perfecta de la hipocresía socialcomunista: alientan en las calles las protestas sociales contra el Ejecutivo regional de Isabel Díaz Ayuso por haber abandonado a su suerte, según ellos, a las zonas más desfavorecidas y, entretanto, sus dirigentes disfrutan de carísimos yates y de opíparas comidas. Nada hay de malo en que un político se tome unos días de descanso, pero en estos momentos, más que nunca, urge que la vida privada de los representantes públicos guarde la mesura y la discreción que demanda el hecho de que millones de españoles españoles están pasando por una situación económica crítica.  Las imágenes de Óscar Puente, político de gustos caros, resultan inoportunas por el momento elegido para el «dolce far niente» y, sobre todo, por la ostentación que reflejan. No es delito obviamente, pero desde un punto de visto ético traducen una falta de solidaridad clamorosa con el sufrimiento de millones de españoles.

El alcalde de Valladolid, que llevó a los tribunales al Gobierno de Castilla y León por las restricciones impuestas para frenar la extensión del virus en su ciudad -fue vapuleado por la Justicia, que decidió denegar las medidas cautelares solicitadas por el Ayuntamiento que exigía la suspensión de las medidas sanitarias-, se ha retratado como un hipócrita. Criticó fieramente al Gobierno regional de Castilla y León por aplicar medidas sanitarias en Valladolid , mientras le acusaba de ser responsable de la muerte de 4.000 personas por coronavirus, y ahora, en plena segunda oleada de la pandemia, cuando su ciudad lleva tres semanas en Fase 1, con restricciones similares a las de los barrios de Madrid donde se han limitado los movimientos, se va de vacaciones.

Óscar Puente es el perfecto paradigma del cinismo socialcomunista: insta a la población a revolverse contra los gobiernos «criminales» del PP y, mientras, se pega la vida padre.

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