Si Podemos quiere hacer una charlotada contra el Rey, que se vayan al casoplón de Iglesias
La Plataforma Consulta Popular Estatal Monarquía o República, un engendro en la órbita de Podemos e Izquierda Unida, ha organizado una bufonada el próximo sábado en centenares de localidades de toda España que pretenden se convierta en un referéndum sobre monarquía o república. La delegada del Gobierno en Madrid se ha lavado las manos con el argumento de que no tiene competencias para «autorizar o prohibir» esta «supuesta consulta popular», que no considera como tal porque «para ello tendría que haber sido aprobada por los plenos de los ayuntamientos donde vaya a tener lugar y autorizada por el Ministerio del Interior, extremos que en ningún caso han sucedido». Eso sí, los alcaldes del PSOE no impedirán el circo porque son meras «mesas informativas». Quien se ha mostrado tajante ha sido el Ayuntamiento de Madrid, que no dejará que se coloquen las urnas de votación en los 21 distritos de la capital porque se trata de una consulta que no admite ni la Ley de Bases del Régimen Local ni tampoco el Reglamento Orgánico de Participación Ciudadana. Además, sostienen, en los casos que no puedan aferrarse a estos argumentos, aludirán a la movilidad para despejar la vía pública de esta votación.
Parece evidente que los municipios gobernados por la izquierda van a hacer la vista gorda, que es tanto como prestarse a la bufonada. El argumento de que manejan es de una hipocresía superlativa: como los organizadores no hablan de «consulta popular», sino de «mesa informativa», se les va a permitir que hagan el numerito. Una manera de lo más pusilánime de colaborar con la charlotada. Dicen que no tienen capacidad legal para impedir su colocación en la vía pública informada en tiempo y forma. A estas alturas, está claro quién defiende la legalidad y el respeto al marco constitucional (el alcalde de Madrid, por ejemplo) y quiénes se lavan las manos como Pilatos para dar cobertura a la mamarrachada podemita. Si Podemos quiere hacer una charlotada contra el Rey, que se vayan al casoplón de Pablo Iglesias