¿Héroe o villano?
Quizá algún diputado del PSOE se esté haciendo esta pregunta. Quizá tenga sus dudas sobre la conveniencia de pactar con separatistas y comunistas. Pero, ¿cómo apartarme de la voz de mi amo? ¿Seré por ello en un villano? Pues permítame preguntarle una cosa, señor diputado, si esos son sus temores: ¿Quién es el tránsfuga?, ¿quien dice una cosa a sus votantes y luego pacta la contraria, o quien se mantiene fiel a su programa?
Tránsfuga, señor diputado, es quien dice que no dejaría la gobernabilidad en manos de separatistas y luego corre a pactar con ellos, tránsfuga es quien aborrece de Bildu hasta que los necesita, tránsfuga es quien reniega de los populismos hasta que ve peligrar la comodidad de su palacio. Tránsfuga es quien anuncia penalizar el referéndum y luego promete consultas ilegales…
No será usted un villano, valiente diputado, si es coherente con lo prometido en las elecciones. No será usted quien traicione su palabra, sus principios o la historia de su partido.
Porque, ¿quién es el villano? ¿El que se mantiene fiel a su palabra y a su historia, o los que prefieren mirar hacia otro lado cuando se ofende la Rey? ¿Los que respetan las reglas de juego, como hasta hace tiempo hacía el PSOE, o los que manosean el concepto de libertad de expresión para no molestar a quienes no condenan la muerte de sus propios compañeros por defender la libertad? ¿Los que posan con los amigos de ETA en la foto o los que permanecen fieles a la memoria de las víctimas?
La mayoría –aunque sea de su comité ejecutivo– no convierte el error en acierto, ni la mentira en verdad. La ambición por el poder no dispensa de las promesas. Y la propaganda no borra la hemeroteca. Miré a su alrededor, Sr. diputado, a lo prometido, a las víctimas y a la España y a la Constitución que ha prometido defender, y luego respóndase quién es el tránsfuga ¿Vd o ellos? Quizá ellos sean mayoría pero no es la mayoría la que se mira al espejo cada mañana, sino usted.
Agustín García, profesor de Derecho Constitucional.