La corrupción en Madrid-Nuevo Norte salpica de lleno al BBVA

OKDIARIO ha tenido acceso a una denuncia en la que, por primera vez, se denuncian los abusos que se han producido por parte de BBVA en la Operación Chamartín, llamada ahora Madrid Nuevo Norte, y explica el proceso por el que, tras lograr la concesión en 1994, ha incumplido todo lo acordado hasta no quedar nada del contrato original que, en teoría, «no admitía modificaciones». Muchos de los afectados están exigiendo -con razón- que se les devuelva el suelo que les expropiaron, más ahora que tienen constancia de los extraños movimientos realizados por Adif, propietaria de los terrenos, que han terminado suprimiendo sus derechos.
BBVA se comprometió cuando se le adjudicó el contrato en 1994 a respetar los derechos y a negociar con los antiguos propietarios de los terrenos el pago de los mismos, pero aquel compromiso ha quedado en nada. Ahora, uno de los responsables de la adjudicación del suelo de Madrid Nuevo Norte a BBVA señala en un documento interno el comportamiento contrario a la «normativa contra la corrupción», advirtiendo que se produce un «quebranto contra la Hacienda Pública» y que la última modificación se hizo solo para beneficio de BBVA. Es decir, se han «saltado los controles», han hecho desaparecer las cláusulas que protegían a «Adif de tener que pagar a los reversionistas cualquier reclamación» y han realizado modificaciones para las que no estaban autorizados sobre el contrato original de concesión de los terrenos de Chamartín en 1994.
En suma, un escándalo en toda regla que afecta de lleno al BBVA y ante el que está obligado a dar una respuesta. Está en juego, obviamente, su reputación y su imagen de banco comprometido como el interés general en un momento en que sigue aspirando a hacerse con Banco Sabadell pese a las trabas impuestas por el Gobierno. Si BBVA quiere ser creíble tiene que empezar por despejar las cada vez más espesas sombras de duda que planean sobre su papel en este importante plan de desarrollo urbanístico en Madrid.