Cuando adquieres o adoptas un caballo, si bien legalmente ya es tuyo, él no se sentirá de la familia hasta que logres ganarte su confianza. Domar un caballo puede resultar un desafío divertido, aunque también puede ser frustrante. Tenemos que tener muy presente que solo tratándolo con respeto, cariño y paciencia conseguiremos disfrutar de la compañía de este noble y magnífico animal. Por más social que sea el equino y que esté acostumbrado a estar con humanos, al igual que para nosotros, no todas las personas son iguales. Nuestro carácter, nuestra forma de ser, nuestros movimientos, todo es único y nuestro futuro amigo equino lo sabe.
¿Cómo comenzar a entrenar para domar un caballo?
Estos tips te ayudarán a saber cómo domar a tu caballo:
- Antes de intentar domesticar a tu caballo debes informarte muy bien cómo debe hacerse, ya que se trata de un animal bastante grande, por lo que sus reacciones pueden ser peligrosas.
- Es muy útil conocer su historia antes de domar un caballo que has adoptado e intentas entrenar. Comienza con el criador o dueño anterior, para que te cuente sobre la personalidad del animal, si es dócil y amistoso o rebelde y violento.
- Asegúrate que tu caballo esté vacunado y averigua cómo ha sido alimentado. Los caballos deben estar vacunados contra enfermedades infecciosas y otros problemas exclusivos de equinos. Los cambios repentinos de la dieta pueden provocar problemas graves.
- Adapta tu método de entrenamiento a sus intereses de conducción. Los caballos destinados a competencias como carreras, deben entrenarse de una manera diferente, o también los destinados a realizar trabajos como corte de ganado. Entrena a tu equino con las técnicas adecuadas para el propósito previsto.
- Deja que el caballo esté cerca de otros caballos domesticados. Llévalo a un prado donde pueda estar cerca de otro caballo ya domesticado. Esto servirá para que tu caballo vea, que cuando el otro equino se acerca a ti respondiendo a tus órdenes lo premias con golosinas. Con el tiempo hará lo mismo y se acercará a ti para obtener las exquisitas golosinas. Respóndele con caricias y tonos suaves de voz.
Si quieres domar a tu caballo primero debes ganarte su confianza
Para poder comenzar a domar a tu caballo, en primer lugar debes ganarte su confianza. Para esto debes tratar de acercarte a él, igual como lo harías cualquier otro animal doméstico, solo que mucho más grande y fuerte.
Esto quiere decir que hay que observar muy bien los movimientos y la mirada del equino, antes de interactuar con él. Por ejemplo, si a medida que vamos acercándonos vemos que gira su cabeza o comienza a mover sus patas en forma nerviosa, lo mejor será que te apartes.
Una forma de acercarnos y que nos vaya aceptando de a poco, es dándole forraje y de esta forma vaya adquiriendo la confianza necesaria.