Recogen 26.000 firmas contra la «represión» en Galapagar por manifestarse frente al casoplón de Iglesias
Vecinos de Galapagar han entregado este martes 26.000 firmas de ciudadanos de toda España «contra la represión ideológica» por manifestarse frente al chalet del vicepresidente segundo del Gobierno y la ministra de Igualdad. “Pablo Iglesias e Irene Montero han secuestrado nuestro pueblo y quieren silenciar a los vecinos que discrepamos con su Gobierno. Estamos indignados con la situación excepcional que estamos viviendo», denuncian.
A las puertas del Consistorio de la localidad estos vecinos critican que «el comportamiento del vicepresidente y de la ministra es una campaña de represión ideológica en toda regla». Asunción Domínguez, vecina de Galapagar, ha ejercido de portavoz para detallar «el acoso» que están sufriendo y reclamar al Partido Popular y Vox que no permitan «que Galapagar sea el cortijo privado de los Iglesias». Concejales de ambos partidos han apoyado la iniciativa.
Con carteles y pancartas con lemas como «Libertad para España», «La Guardia Civil no sirve a ningún gobierno, sirve a su país» o «#GobiernoDimisión», estas personas han desgranado cómo la situación ha degenerado. Han recordado como todo empezó a mediados de mayo cuando varias decenas de personas con cacerolas y banderas de España fueron a gritar ‘libertad’ y ‘viva España’ en las inmediaciones del chalet de Pablo Iglesias. Poco después, la Guardia Civil que tenía un puesto de vigilancia estática permanente pasó de proteger la entrada de la vivienda a cortar toda la calle e impedir el paso.
Así, aseguran que la urbanización donde viven los líderes de Podemos está «secuestrada». Con el objetivo de «proteger su casoplón, mantienen secuestrada la zona con un ejército personal -pagado con los impuestos de todos- de 50 agentes, una sección de élite, tres suboficiales y 20 vehículos para identificar, multar y reprimir los derechos de los ciudadanos, su libertad de expresión, manifestación y circulación», ha explicado Ascensión Domínguez.
“Los representantes políticos de Galapagar tienen el deber de denunciar la grieta democrática que se está produciendo en la localidad. Por eso hemos venido hasta aquí, para que promuevan en el Pleno municipal una moción de condena por la vulneración de los derechos fundamentales de los vecinos de Galapagar y soliciten al Gobierno el fin de este estado de excepción encubierto e injustificado”, ha agregado la portavoz vecinal.
Jarabe democrático
Así mismo, los denunciantes rememoran que «hasta hace bien poco, la pareja Iglesias Montero llamaba ‘jarabe democrático’ a las distintas formas de acoso e intimidación que alentaban contra los políticos de centro-derecha como Rosa Díaz, Esteban González Pons, Cristina Cifuentes, Soraya Sáenz de Santamaría, entre otros». Sin embargo, «ahora que viven como los ricos, van a por los ciudadanos libres porque les molestan las cacerolas y la bandera de España».
Critican que los vecinos del municipio y las personas que discrepan con el Gobierno, viven una escalada de «insultos y amenazas, además del acoso policial y la restricción de derechos fundamentales que sufren cada día». Explican que «el encantador pueblo de la sierra norte de Madrid donde los Iglesias instalaron su residencia de lujo, se ha convertido en coto privado del comunismo».
Inciden en que «cientos de ciudadanos anónimos son multados por manifestarse contra el Gobierno con el único objetivo de silenciarlos e intimidarlos, en lo que ya puede definirse como una campaña de represión ideológica».
Acompañan su denuncia con informaciones de diversos medios de comunicación donde se recoge que una unidad de élite de la Guardia Civil ha blindado la casa de Pablo Iglesias, que la Guardia Civil ha prohibido incluso a los vecinos del vicepresidente poner banderas en las «calles aledañas» o cómo en 2013 Irene Montero aseguraba que «un escrache no es acoso sino interpelar a los diputados para que hablen con nosotros».
La denuncia
El texto que han suscrito vecinos de Galapagar y personas de toda España que apoyan la denuncia a través de Hazte Oír, dice bajo el título «Liberen Galapagar»:
«Concejales del PP y Vox en Galapagar, como ya saben Pablo Iglesias e Irene Montero están restringiendo las libertades fundamentales de los vecinos de Galapagar para proteger sus intereses particulares, como si el pueblo fuera ahora su cortijo privado.
Los mismos que alentaban al acoso y la intimidación sobre los políticos del centro-derecha español han organizado ahora un despliegue armado en torno a sus terrenos para identificar y multar a cualquier manifestante contrario a su ideología comunista. Esta coerción policial, sin precedentes en la localidad, ha llegado al punto de distorsionar la imagen real del pueblo ante el resto del país y afectar a la vida cotidiana de los residentes de la zona que ven restringidas su libertad de circulación, manifestación y expresión.
Galapagar no necesita una compañía de la Guardia Civil dotada de armamento automático ni una sección de vehículos patrullando la parcela de Pablo Iglesias e Irene Montero, sino recuperar la normalidad, tolerancia y libertad que han caracterizado siempre al pueblo.
Por eso les pido que promuevan en el pleno municipal una moción de condena por la vulneración de los derechos fundamentales de los vecinos de Galapagar y soliciten al Gobierno el fin de este estado de excepción encubierto e injustificado.
Muchas gracias».