La norma que impide la igualdad entre el fútbol femenino y el masculino en los Juegos Olímpicos

El fútbol representa dos grandes opciones para medalla en los Juegos Olímpicos de París. La delegación española sigue remando en París con el objetivo de superar los 22 metales de Barcelona 1992 y en las previsiones se ha contado con las dos preseas de un deporte rey cuyo tronío es menor en las citas olímpicas. Podemos decir que el fútbol domina durante todo el año pero en las dos semanas de Juegos pierde protagonismo en lugar de otros deportes cuyo máximo galardón es un oro olímpico. Todo tiene que ver con una cuestión histórica.

El fútbol es uno de los deportes más antiguos de los Juegos pero a lo largo de la historia ha sido visto con cierto escepticismo por los más ortodoxos. A pesar de que en los Juegos Olímpicos se disputa la competición futbolística más antigua de la historia, lo cierto es que el máximo premio a nivel de selecciones es ganar un Mundial o una Eurocopa y eso queda por detrás de un oro olímpico, a diferencia del resto de deportes en los que no hay nada más importante que colgarse el preciado metal en unos Juegos.

La historia del fútbol en los Juegos Olímpicos

La historia del fútbol a nivel profesional en los Juegos Olímpicos comienza en Londres 1908, cita en la que se disputó por primera vez la competición a nivel de selecciones después de las ediciones de París 1900 y San Luis 1904 en las que habían participado jugadores a nivel amateur. Hay que tener en cuenta que el Real Madrid nació en 1902 para entender la magnitud que tenía esta competición, que se consideraba como un Mundial de fútbol en el que los países competían por el título más importante que estaba en liza: un oro olímpico.

El éxito de la competición fue tal que la FIFA se metió por el medio para organizar la competición junto con el COE en París 1924 y Ámsterdam 1928. La competición de fútbol en los Juegos Olímpicos fue el origen de la creación del primer Mundial de fútbol que se disputó en Uruguay en 1930. Para que su nueva creación no perdiera valor, la FIFA sacó al fútbol de Los Ángeles 1932 regresando ya en Berlín 1936. Pero ya todo fue distinto.

Entre Londres 1948 y Moscú 1980 fue época de dominio de los equipos soviéticos que se tomaban más en serio la competición por los beneficios económicos que reportaba una medalla para los atletas y a partir de los años 80 se tomó una decisión con el objetivo de relanzar una competición que había quedado en un segundo planto ante el Mundial de fútbol. En 1930 estaban a la par pero 50 años no había color.

Por ello, en Los Ángeles 1984 la FIFA y el COI llegaron a un acuerdo para que los jugadores profesionales de todas las Confederaciones pudieran participar a excepción de UEFA y Conmebol, que sólo podían llevar a los futbolistas que no hubieran disputado el Mundial. Esto convirtió el fútbol en los Juegos Olímpicos en un torneo de carácter juvenil sentando los bases de la competición que se disputa a día de hoy. En Barcelona 1992 se dio un paso más y se establecieron las reglas de hoy en día: las selecciones debían estar compuestas de jugadores sub-23 a excepción de tres futbolistas mayores de esa edad. Esta nueva norma desembocó en el primer título de España tras ganar a Polonia en la mítica final del Camp Nou.

El fútbol masculino y femenino en los Juegos Olímpicos

A diferencia del fútbol masculino, en el fútbol femenino no hay límite de edad a la hora de confeccionar las plantillas. Esto también tiene que ver con una decisión de la FIFA y se explica en la importancia del Mundial femenino de fútbol, que aún no está a la par con lo que genera uno masculino. Así que con el objetivo de potenciar al máximo el fútbol femenino se permite que todas las estrellas acudan a la cita olímpica.

El fútbol femenino llegó a los Juegos Olímpicos en Atlanta 1996 y España ha tenido que esperar hasta 2024 para poder meterse en una cita en la que es máxima favorita para ganar el oro en París. La vigente campeona del mundo puede hacer historia subiéndose a lo más alto del podio en su primera participación en un evento de este tipo.

Al igual que en la categoría femenina, el fútbol masculino también representa una gran opción de medalla para la delegación española en estos Juegos Olímpicos que se están disputando en París.