Rusia e Irán se asocian para la producción conjunta de combustible nuclear
Después de dos años de duras conversaciones, comenzados en las postrimerías de la negociación de Irán con el G5+1 para cerrar su acuerdo nuclear y recibir el alivio de las sanciones internacionales, Moscú y Teherán han llegado este fin de semana a un acuerdo para trazar una la hoja de ruta del proceso de producción conjunta de combustible nuclear. El anuncio ha corrido a cargo del vicepresidente de la Organización de Energía Nuclear de Irán (AEOI, por sus siglas en inglés), Ali Akbar Salehi, según ha informado la agencia rusa RIA Novosti.
Las conversaciones entre las autoridades rusa e iraní han versado sobre muchos más puntos de intereses comunes y enfrentados —como la guerra en Siria o el mercado del petróleo, en el que Rusia se acaba de convertir en el mayor productor a nivel mundial—, ha dicho Salehi, si bien el asunto del combustible nuclear ha sido la clave de todo. «Uno de los principales puntos tratados en las conversaciones» ha girado en torno al sector energético nuclear.
Todo en plena polémica entre la nueva Administración estadounidense liderada por Donald Trump y el país de los ayatolás. La Casa Blanca ha amenazado a Irán con volver a sancionar al país mientras trata de hallar el modo de torpedear el acuerdo firmado por su antecesor Obama que le ha dado entrada de nuevo al mercado internacional de la energía y ha fortalecido su posición en la convulsa región de Oriente Próximo.
«Siempre hemos dicho que necesitamos el asesoramiento de Rusia en este sector», ha admitido públicamente Salehi, quien además ha dado oficialidad al acuerdo que permitirá continuar con lo que Teherán defiende que es un programa civil de energía atómica. La hoja de ruta, ha concluido, fue trazada en el marco de la última visita del representante de AEOI a Rusia y «fue aprobada por las autoridades de ambos países”