Los pasos para limpiar una piscina vacía: toca hacerlo ahora

Es probable que en estas semanas vacíes definitivamente la piscina, y toca esperar hasta el próximo año para volver a disfrutarla. Seguro querrás que se conserve de la mejor forma posible, por lo que es indispensable repasar cómo limpiar una piscina vacía.

Y es que son muchas las personas que optan por mantener sus piscinas sin agua de un verano al siguiente. Si eres una de ellas, tienes que saber que existen algunos cuidados específicos que deberías considerar para que los materiales no se echen a perder.

¿Cómo limpiar una piscina vacía?

Antes de tomar la decisión de vaciar la piscina, tienes que averiguar cuál es el material del que está hecha y cómo preservarlo. Dependiendo del material sus cuidados podrían cambiar, y no en todos los casos es recomendable vaciarlas.

Por otro lado, también puede que los productos que debas usar sean modificados por el material de la piscina.

Una vez que hayas eliminado toda el agua de su interior, barre para deshacerte de la basura y espera a que se seque un poco. Cuando esté totalmente limpia y ya seca, debes echarle salfumán o ácido clorhídrico y cepillar la superficie para dejarla impecable.

Este producto es imprescindible tanto para el fondo de la piscina como para sus paredes. Si nunca antes has utilizado salfumán, tranquilo, la reacción que genera con vapor y efervescencia es normal. Debes permitirte que actúe durante unos diez minutos. Asegúrate de estar lejos de la piscina durante ese rato, porque los químicos desprenden sustancias que pueden ser nocivas.

La mejor forma de retirar el salfumán es con una manguera con buena presión. Sin exagerar para no dañar las paredes de la piscina, encárgate de éstas y el suelo de la piscina y quita lo que quede de ácido clorhídrico con una bomba de achique si hace falta.

Reparaciones y otros detalles

Si tu piscina está sufriendo las consecuencias del paso del tiempo, debes aprovechar que queda vacía para reparar los daños. Puedes solucionar problemas comunes como las grietas o los gresites deteriorados, o mejorar su aspecto con limpiacristales.

Finalizadas las obras estéticas, vuelve a limpiar la piscina y pasa por el fondo un rodillo con algún producto contra las algas. Aumentarás su resistencia, y cuando vuelvas a llenarla en mayo o junio del año entrante estará en inmejorables condiciones.

De todas maneras, debes consultar a profesionales sobre la manera de poder limpiarla a fondo y los materiales que debes tener presente.