Los elementos plásticos del coche se queman en verano: cómo recuperarlos

En estos días de verano, no es ningún secreto que los rayos del sol pueden provocar severos daños en la piel de los seres humanos. Sin embargo, es tal la potencia del que pueden deteriorar casi cualquier material que se interponga en su camino. Pensando en esto, queremos saber cómo reparar los elementos plásticos del coche que se han quemado en verano.

Probablemente creías que ese objeto de plástico ya dañado por los rayos solares ya no podrá usarse, pero con un poco de ingenio tendrás la posibilidad de reutilizarlo en vez de sustituirlo. Tiene sentido especialmente en el caso de los coches, porque rara vez logramos mantenerlos a salvo del sol en esta época. Y como algunos de los componentes son de plástico, tienden a dañarse.

Elementos plásticos del coche, víctimas del verano

El volante, los guarnecidos, los embellecedores y otros tantos elementos acaban siendo víctimas de la estación. Expuestos durante largas horas al sol, no pasará demasiado tiempo hasta que puede observarse cierto desgaste en los materiales. Esto tiene dos consecuencias negativas. La primera, que estéticamente no lucirá tan bien. Y la segunda, que su precio será menor.

Es decir, el día que quieras vender tu vehículo te encontrarás con que cuesta menos por el deterioro provocado por el sol en él. Recuperar las piezas plásticas cuando veas que están dañadas es clave para que su valor de mercado no sea afectado.

Así puedes recuperarlos

Por supuesto, para que esto valga la pena antes que nada tienes que revisar que la estructura de los plásticos esté en buen estado. Siempre que sean quemaduras superficiales, que incidan en su apariencia pero no en su estructura.

Todo lo que necesitas es pintura monocomponente en aerosol de aplicación directa o pintura en bote de aplicación aerográfica. Sumado a ello, te facilitará la tarea contar con renovadores específicos para las ópticas y diversos tipos de revestimientos.

Cuando puedas, desmonta los plásticos del coche para trabajar mejor. Si no puedes desmontarlos, cubre los elementos cercanos para no pintarlos sin querer durante la faena. A continuación aplica la pintura con un acabado que coincida con el que tiene tu coche.

Estas pinturas son baratas y sencillas de aplicar, pero no tan resistentes ni durables como las vienen de fábrica en los vehículos. Suponen una solución simple y efectiva, pero si deseas resultados profesionales tendrás que llevar tu automóvil a un experto porque no hay otra manera de hacerles frente.