Cómo lavar la ropa con lejía
Si quieres que la ropa recupere su blanco por completo, puedes echar en la lavadora o a mano, un poco de lejía aunque debes ir con mucho cuidado. Veamos a continuación, paso a paso y de manera fácil, cómo lavar la ropa con lejía.
La lejía para la ropa, suele utilizarse tan solo cuando hablamos de prendas de color blanco que han perdido su blancura original o quizás, han acabado teñidas. Esta es una solución acuosa a base de hipoclorito de sodio. Es una sustancia altamente tóxica. Si se utiliza con las precauciones adecuadas, garantiza una larga vida a nuestras prendas más preciadas. Por ello, debemos saber cuánta cantidad de lejía se debe usar si bien este producto es capaz de «quemar» la ropa y aunque recuperará el blanco, puede que te salga con algún que otro agujero. Veamos a continuación los pasos que dar para lavar la ropa con lejía de manera correcta.
Pasos para lavar ropa con lejía
- El primer paso antes de lavar artículos blancos con lejía es la selección de artículos. No podemos tratar todas las telas con lejía. Esta solución hace «milagros» en todos los tejidos puros de algodón, algodón y lino, o en telas de lino puro. No se recomienda su uso en prendas de lana sintética y de color. Si una prenda blanca tiene patrones de colores, verifica la resistencia de los colores al blanqueador.
- Por otro lado, puedes probar el producto diluido en una parte oculta de la tela. Cuidado con las partes de metal ya que la lejía es corrosiva.
- Si tenemos que lavar los artículos blancos con lejía, a mano, necesitamos un recipiente que sea bastante grande. Llena el recipiente o lavabo en agua fría y diluye un vaso de lejía en aproximadamente diez litros de agua. Deja la prenda en remojo por 20/30 minutos.
- Enjuaga bien las prendas y proceda al lavado normal con detergente normal para lavados de manos. Se recomienda encarecidamente proteger tus manos con guantes de goma muy resistentes. Retira todos los restos de lejía de los guantes después de su uso. De lo contrario, después de un corto período de tiempo tendrías la sorpresa no deseada de encontrar los guantes con agujeros debido al poder corrosivo de la lejía.
- Si los artículos blancos para lavar con lejía son muy voluminosos, como sábanas o toallas, podemos lavarlos de forma segura en la lavadora. La dosis recomendada es un vaso de 150 ml por lavadora. Vierte el detergente como de costumbre en la bola de dosificación o en el compartimiento apropiado. Vierte la lejía en el compartimento con el símbolo CL, o en la bandeja de aditivos si decidimos no utilizar el suavizante. Si, en cambio, tenemos que usar los aditivos, comenzamos el ciclo de prelavado y vertimos en este ciclo. Después de este ciclo, podemos comenzar el ciclo de lavado preferido.
- Para manchas difíciles, es posible realizar un tratamiento directo. Vierte una pequeña cantidad de lejía, suficiente para cubrir la mancha y después de unos tres minutos enjuaga bien.
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- Limpieza