Cómo aliviar la tortícolis

La tortícolis es un trastorno frecuente que provoca rigidez del cuello y la inflamación de los músculos de esta zona. Se da en 3/10.000 personas. Se puede producir por distintas causas como una mala postura al dormir o un movimiento brusco. En otro artículo hablamos de cómo reconocer la intolerancia al gluten, hoy sobre consejos para aliviar la tortícolis.

Casi todos en algún momento nos hemos levantado con dolor en el cuello, rigidez y dificultad para girar la cabeza hacia un lado. Este tipo de trastorno se denomina tortícolis adquirida y se puede causar por malas posturas, estiramiento bruscos asociados a la vida diaria y la práctica deportiva.

En la mayoría de los casos el dolor desaparece de forma espontánea ese mismo día pero a veces puede durar hasta una semana. Si pasado este tiempo la tortícolis no ha disminuido es conveniente ir al médico.

Pasos para aliviar la tortícolis

1. Aplica frío/calor

   La mayoría de tortícolis cursan con una inflamación local. La aplicación de un gel frío (compresa fría o hielo dentro de una bolsa de plástico) durante las 24-48 horas después de la aparición de esta rigidez en el cuello tiene efectos beneficiosos.

   Hay personas que por el contrario sienten mejoría poniéndose una compresa caliente en la zona dolorida. Se pueden utilizar ambos tratamientos de forma alternativa. Puedes usar compresas de gel que venden en farmacia y se pueden congelar, también los hay para poder calentarse. Si no tienes te puede servir un paquete de guisantes o cualquier otra verdura congelada, lo envuelves en un paño fino y te lo aplicas en la zona afectada. Las bolsas de plástico de toda la vida sirve para agua caliente o fría y las puedes usar para aliviar el dolor.

2. Descanso

   Un consejo lógico, ya que cuando se tiene rigidez en el cuello no está uno para ‘muchos trotes’. Hay que darle al cuerpo la oportunidad de sanar, mantener un descanso muscular suave de 24-48 horas sin practicar actividades bruscas, como natación, tenis o cualquier práctica deportiva de impacto.
   
   Si se puede dar paseos o mantener una actividad física moderada siempre que no se tenga que hacer movimientos bruscos. La inactividad o reposo absoluto tampoco es bueno.

3. Antiinflamatorios

   En ocasiones cuando el dolor es muy molesto no queda otro remedio que calmarlo con antiinflamatorios no esteroideos (AINE), los más conocidos son la aspirina y el ibuprofeno.

   

   Hay que tomar la dosis adecuada, en el prospecto indica la dosificación. En caso de que el dolor no cese aún tomando un antiinflamatorio acude al médico para que valore si tiene que recetarte otro compuesto más fuerte o ajustar la dosis.

Buenas practicas para evitar la tortícolis

1. Practica como lograr una buena postura corporal. A menudo cargamos la espalda al trabajar frente al ordenador o al conducir. Aprender buenos hábitos posturales se traduce en menor probabilidad de sufrir contracturas y otras molestias musculares.
2. Ejercita el cuello con movimientos suaves para aprender a relajarlo. Realiza estiramientos suaves un poco antes de  irte a dormir. Rota la cabeza en ambas direcciones.
3. Se recomienda dormir de lado imitando la postura fetal. Procura tener las piernas flexionadas y el cuello recto.
   
4. Usar una almohada ergonómica para dormir, como las almohadas cervicales, el colchón no sea muy blando.

¿Te han sido útiles estos pasos para aliviar la tortícolis?