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‘La isla de las tentaciones’: Melyssa huye desesperada tras imágenes comprometidas de Tom

La relación de Melyssa y Tom en la cuerda floja en 'La isla de las tentaciones'

La isla de las tentaciones
La isla de las tentaciones.

Tan solo han hecho falta dos programas para que la nueva temporada de ‘La isla de las tentaciones’ haya conseguido meterse a los espectadores en el bolsillo. El formato estrella de Mediaset volvió a liderar en su segunda entrega, consiguiendo un 20% de share en la primera hoguera de las chicas.

En esta ocasión, fueron ellas las primeras en enfrentarse a la temida hoguera. Una noche en la que Melyssa fue la más perjudicada, mostrándose completamente desvastada tras ver las imágenes en las que Tom, su pareja, tonteaba con otras chicas durante los primeros días en Villa Montaña.

Una entrega en la que también se incorporaron dos nuevos tentadores sorpresa al grupo de los solteros. Dos viejos conocidos del programa, Oscar, tentador de la primera edición, y Andrea, esta vez sin Ismael, volvieron a la isla para revolucionar a los participantes de la nueva edición.

Pero sin duda, la gran protagonista de la noche fue Melyssa. La joven afrontó la hoguera con positivismo. Sin embargo, aunque puso su mejor cara mostrando una confianza ciega en su pareja, se derrumbó incluso antes de ver las imágenes.

Tengo miedo. Soy muy celosa y sensible, no sé como me va a sentar. Espero que no me haga daño porque yo no sé lo voy a hacer. O me respeta o no vuelve a entrar a mi casa, soy mejor que todas las que están ahí dentro”, aseguró la concursante.

En las imágenes de los primeros días en ‘La isla de las tentaciones’, Melyssa vio cómo Tom revelaba a las solteras los celos extremos de su novia. Además, también vio cómo bailaba encima de la mesa con Luzma y le daba un beso en la nariz en la piscina. Poco después, la tentadora le lamía el cuello, unas imágenes que sobrepasaron a Melyssa.

La joven desesperada se quitó los zapatos y huyó corriendo de la hoguera, ante la atenta mirada de sus compañeras. “¡Hijo de p***! ¿Le tiene que chupar la cara y dejarse? Hijo de p***, le odio”, gritaba entre lágrimas. “¡Me quiero ir! ¡Cómo voy a ver bien que le dé un beso en la nariz y que la otra le chupe el cuello, es un cabronazo de mierda! Me dijo que me iba a respetar”, exclamó.

“Que no aguanto, quiero ir a casa con mis padres, y quiero que sus padres vean eso. Yo no puedo pasar por esto”, añadió. Finalmente la joven regresó a la hoguera, dispuesta a ver las imágenes junto a sus compañeras, que no dudaron en apoyarla ante el mal trago que acababa de pasar.

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