La sexta edición de MasterChef Celebrity está siendo todo un éxito y es, en gran parte, por la aparición cada semana de Verónica Forqué.
Las pruebas de exteriores del concurso de cocina de TVE se convierten en lo más comentado la noche de cada lunes debido a las salidas de tono de Verónica Forqué en MasterChef Celebrity porque la actriz pierde los nervios en cada cocinado y lleva al límite a sus compañeros.
La décima gala llevó a los concursantes de MasterChef Celebrity hasta Tenerife. Allí Juanma Castaño, que ganó la primera prueba, tuvo que decidir los componentes de cada equipo y ejercer de capitán de ambos, todo un reto para el que el presentador asturiano estaba más que preparado. El equipo rojo, formado por Carmina Barrios y David Bustamante, no tuvo ningún problema: los dos concursantes -sabiendo lo que iba a pasar en las cocinas del equipo azul- cogieron las riendas del cocinado e hicieron una prueba espectacular que les llevó directamente a la semifinal.
Mientras tanto, el equipo azul, formado por Belén López, Miki Nadal y Verónica Forqué, necesitó la constante ayuda del capitán para hacer frente a un cocinado que fue, cuanto menos, caótico.
Verónica Forqué volvió a hacer de las suyas y no dudó en sacar de sus casillas a sus compañeros, que ya reían por no llorar. Intentó abrir una olla exprés en funcionamiento, no paró hasta que la dejaron probar el granizado de pepino y no dudó en gritar a Belén López, todo esto con el consentimiento de los jueces, que siempre han defendido la actitud de la actriz.
El capitán, Juanma Castaño, decidió que tenía que ‘entretener’ a Verónica Forqué con alguna tarea con la que la actriz pudiera liberar toda su energía y ahí llegó el momento de pelar lichis.
Fue en ese momento cuando las cámaras del programa captaron una imagen que no ha pasado desapercibida en las redes sociales: de la boca de Verónica Forqué caía lo que parece ser un escupitajo que iba directo a la comida. La actriz, que parece no darse cuenta de lo ocurrido, acto seguido se echa a reír y le planta un beso en la boca a Juanma Castaño.
La polémica prueba de eliminación
Todo apuntaba a que la prueba de eliminación iba a ser mucho más tranquila que la de exteriores, pero Verónica Forqué tenía otra sorpresa. La actriz no apareció en cocinas y fue Pepe Rodríguez el encargado de trasladar el mensaje que Forqué le había enviado justificando su ausencia esa noche:
«Pepe, soy Verónica. No tengo buenas noticias. No me encuentro bien, estoy agotada. He luchado diez semanas, la experiencia de las mejores de mi vida. Usted sabe que yo soy muy luchadora y de usted estoy aprendiendo mucho. ¡Dios mío! Qué bien lo estoy pasando y qué lástima siento de no poder estar a la altura, pero es que no puedo, el cuerpo no puede. No puedo con mi alma. Volveré cuando esté buena».
Sus compañeros, que no entendían nada, se enfrentaron a la prueba de eliminación y Belén López fue la primera salvada de la noche. En el duelo sólo quedaban Miki Nadal y Juanma Castaño, que se enfrentaban mano a mano para ver quién de los dos se salvaba y pasaba a la semifinal del programa.
Sin embargo, las sorpresas no habían acabado en MasterChef Celebrity: los jueces decidían salvar a ambos.