En la posguerra era el café de los pobres: hoy lo recomiendan los expertos como alternativa saludable

Por la mañana, apenas abrimos los ojos, buscamos café: algo que despierte, que dé energía, que marque el inicio del día. Este ritual se ha heredado de generación en generación, formando parte de la rutina. Pero aunque hoy parece algo normal y cotidiano, no siempre fue así.
Durante la posguerra, el café era un lujo al que pocos podían acceder. No había cafeteras ni cápsulas, ni siquiera granos. El café llegaba por contrabando o no llegaba. Ante la escasez, la gente tuvo que improvisar, adaptarse y encontrar sustitutos. Así nació una alternativa inesperada: el café de achicoria.
Hoy, décadas después, vuelve como una opción saludable, sin cafeína y con beneficios digestivos.
Este es el café que se tomaba en la posguerra y que hoy vuelve como opción saludable
El café de achicoria es una bebida elaborada con la raíz tostada y molida de la planta Cichorium intybus. Tiene un sabor parecido al café, aunque más terroso y amargo, y lo más importante: no contiene cafeína.
La raíz de achicoria es rica en inulina, una fibra prebiótica que favorece la salud intestinal. También aporta vitaminas del grupo B y minerales como hierro, potasio y magnesio.
Esta planta crece en terrenos baldíos, prados y caminos. Su raíz se seca al sol, se tuesta (a unos 175ºC hasta que se dora) y luego se muele. Así se obtenía un polvo marrón oscuro, con un aroma muy parecido al del café.
¿Cómo se prepara este café?
Hay varias opciones para prepararlo.
Método tradicional (infusión):
- Ingredientes: 2 cucharadas de raíz de achicoria tostada y picada + 1 taza de agua.
- Preparación: Hervir la raíz en el agua durante 10-15 minutos. Colar y servir caliente. Puedes añadir leche o miel si lo prefieres.
Prensa francesa:
Añade achicoria molida al recipiente, vierte agua caliente y deja reposar 5-7 minutos. Luego presiona el émbolo.
Versión fría:
Mezcla agua fría con achicoria tostada y deja reposar 12-24 horas en la nevera. Cuela antes de servir.
Mezclado con café:
Para reducir la cafeína sin renunciar del todo al sabor, mezcla café normal con achicoria molida en la proporción que prefieras.
¿Es saludable el café de achicoria?
El café de achicoria es una excelente alternativa para quienes quieren evitar la cafeína, ya sea por sensibilidad o por decisión personal. Al no contener esta sustancia, evita efectos como el insomnio, la ansiedad o las taquicardias, comunes en el consumo excesivo de café tradicional.
Además, destaca por su aporte en inulina, una fibra prebiótica que promueve una digestión saludable, favorece la flora intestinal y ayuda a aliviar el estreñimiento.
Más allá de la digestión, esta bebida también ofrece beneficios a nivel metabólico y general. Contiene antioxidantes que combaten el envejecimiento celular, y puede ayudar a regular los niveles de glucosa en sangre, lo que la hace interesante para personas con resistencia a la insulina o diabetes.
También apoya la función hepática gracias a su efecto desintoxicante y contribuye a la salud cardiovascular, ayudando a normalizar la presión arterial de forma natural.
Aunque el café de achicoria es generalmente seguro, su consumo excesivo puede provocar efectos no deseados, como gases, hinchazón o un leve efecto laxante. Por eso, es recomendable empezar con cantidades pequeñas y observar cómo reacciona el cuerpo.
Temas:
- Alimentos
- Café
- Gastronomía