Todos los barones dan ya la espalda a Casado y le piden que se vaya hoy y no alargue la agonía

Pablo Casado lleva demasiado plomo en las alas como para levantar vuelo y sortear el asedio al que le están sometiendo los barones del PP. El apoyo a Alberto Núñez Feijóo es unánime dentro del partido y el presidente del PP podría tener las horas contadas. Así lo confirman fuentes consultadas por OKDIARIO, que señalan que «todos los barones del PP le han dado la espalda a Casado una vez conocida su intención de aferrarse al cargo convocando a la Junta Directiva Nacional para la semana próxima». «Todos los dirigentes con poder territorial sin excepción le han pedido que se vaya y le han puesto este martes como fecha límite para que no alargue la agonía hasta el congreso», admiten las mismas fuentes.

«Hay mucha indignación porque tras más de nueve horas de reunión todos los barones esperaban la claudicación de Casado pero ha decidido huir hacia adelante para ganar tiempo y así recabar apoyos de cara a un posible congreso extraordinario para medirse con Feijóo», afirman a OKDIARIO. Pero los barones no están por la labor. El hartazgo de los dirigentes territoriales se produce tras el pretexto -«chapucero», lo califican- al que ha tenido que recurrir Génova con la convocatoria de la Junta Nacional cuando todo el partido estaba exigiendo su dimisión.

Las presiones sobre Pablo Casado para que dimita crecen. A la pinza de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, se ha unido el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno. Los tres dirigentes con más peso a nivel territorial del PP. Si a ellos sumamos a Mañueco tenemos a los cuatro barones principales del PP mostrándole a Casado la puerta de salida.

«Desde mi punto de vista tenemos que resolver el problema lo antes posible. Los problemas se resuelven siempre con diálogo y, por tanto, emplazo a que haya un diálogo con la dirección nacional y que, fruto de ese diálogo, podamos resolver este gran problema que tenemos ahora mismo lo más rápidamente posible», ha dicho Moreno en declaraciones a los periodistas en Sevilla.

El presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha solicitado al partido escuchar a sus «bases» para una «solución urgente» al conflicto porque España «no se merece esto». Más duro se ha expresado el presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, quien ha avisado que esto es ya un «divorcio traumático con el sentir de los afiliados» y que no pueden quedarse «tocando la lira observando el incendio». La presidenta del PP de Asturias, Teresa Mallada, también se ha unido a las palabras del presidente de la Xunta para pedir con «urgencia» que Casado «tome una decisión» acerca de la crisis interna.

Otro que se ha sumado al bando rebelde el presidente del PP de Ceuta y del Gobierno de la Ciudad Autónoma, Juan Vivas, quien ha asegurado que «comparte» la posición de su homólogo gallego en relación con la crisis abierta en el Partido Popular, para la que ha reclamado «decisiones urgentes» que la cierren «cuanto antes».

La presidenta de los populares cántabros, María José Sáenz de Buruaga, ha roto este lunes el «prudente silencio» que ha guardado estos días en torno a la grave crisis desatada en el seno de su partido a nivel nacional. Y lo ha hecho para sumarse a Feijóo y exigir a Casado que solvente «ya» esta situación y que lo haga a través del «diálogo» en vez de «ahondar en la política de bandos».

Revienta el núcleo duro de Casado

Las grietas en el PP también las han abierto varios de los vicesecretarios del partido que han pedido a Casado que convoque un congreso y hasta incluso amenazaron con dimitir si no lo hacía, como es el caso de Elvira Rodríguez, Cuca Gamarra, Ana Pastor, Andrea Levy o Belén Hoyo.

En el entorno de Casado no hay más que puro instinto de supervivencia. Según los cálculos del entorno de Casado, más de la mitad de los presidentes provinciales le respaldarían para dar la batalla al menos hasta el próximo congreso nacional del partido. Muchos de ellos -según los más optimistas en Génova- apoyarían que aguante al frente del partido al menos hasta el próximo congreso nacional que está previsto en principio para julio si no se adelanta.

El desastre al que ha llevado Casado al partido es de tales dimensiones que se resume en la encuesta de Data10 para OKDIARIO en la que el PP perdería las elecciones generales, dejándose 36 escaños en apenas un mes y se vería sorpassado por los de Santiago Abascal (84), nuevo líder de la oposición. Una caída sin precedentes que refleja, por primera vez, las enormes dimensiones electorales de una crisis histórica.