Vox rompe con el PP en Zaragoza y no apoyará los Presupuestos: «Se abre un periodo nuevo»
Para Vox, la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) es una línea roja en la política municipal
El PP advierte a Vox que Zaragoza "sí tendrá Presupuestos": "La ciudad no se puede parar"

Este viernes, Vox ha anunciado que no apoyará los Presupuestos del PP en Zaragoza tras no lograr un acuerdo con la alcaldesa Natalia Chueca para eliminar las sanciones a los conductores por la implementación de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).
«Comienza un cambio de ciclo», ha advertido el portavoz del grupo municipal de Vox, Julio Calvo, desmarcándose de las políticas verdes de los populares. Para Vox, las ZBE son una línea roja en la política municipal marcada desde la portavocía nacional de Agenda España.
Pese a ello, el PP confiaba en que el adelanto electoral de Jorge Azcón no afectara a los Presupuestos de Zaragoza. Según los populares, el acuerdo con Vox estaba pactado tras meses de negociación con el objetivo de aprobarlo antes de que terminara el año.
Sin embargo, Vox ha decidido romper en el último momento con el PP. Son varios los motivos que esgrimen desde la formación, pero el principal es el modelo de «ciudad climáticamente neutra» que Natalia Chueca está implantando desde el comienzo de la legislatura y que forma parte de su principal proyecto político.
Los Presupuestos en Zaragoza y la ZBE
Según defienden los populares, el modelo que defiende Chueca está siendo referente en las ciudades de la Unión Europea en boga con la Agenda 2030 e implica multitud de medidas, sobre todo, la implantación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE).
El PP logró sacar adelante una nueva ordenanza en Zaragoza el pasado año, gracias a la abstención de Vox, después de negociar algunos cambios para no votarla en contra. Frente a Sevilla, Valencia o Talavera de la Reina, donde el PP ha detenido la ZBE, en Zaragoza los populares señalan que no es posible precisamente porque la ordenanza ya está aprobada. Un argumento que no ha logrado calar en Vox, donde consideran que se podía haber encontrado «otra fórmula».
«Nos tildan de no respetar la normativa europea en materia de bajas emisiones, pero quienes no respetan la ley española son ellos», señalan desde Vox a OKDIARIO.
En Zaragoza, desde el 12 de diciembre, los conductores sin Distintivo Ambiental de la DGT o aquellos que no estén debidamente inscritos en el Registro municipal se enfrentan ya a sanciones. La formación que lidera Santiago Abascal puso como condición para aprobar los Presupuestos que se eliminaran dichas sanciones.
Según ha podido saber este diario, desde el Ejecutivo de Natalia Chueca se intentó paralizar esta medida, pero el Gobierno de España no lo autorizó. Ante esta situación, Vox propuso que sólo fueran efectivas si los niveles de contaminación superaban los permitidos –teniendo en cuenta que en Zaragoza gracias al cierzo apenas hay contaminación–, pero finalmente no llegaron a un acuerdo.
Las tensiones de PP y Vox en Zaragoza
Para el PP la posición que ha optado Vox con los Presupuestos en Zaragoza es una «absoluta traición» y la alcaldesa ya ha advertido que habrá Presupuestos. «Se abren muchas variables, pero si hay que recurrir a una moción de confianza, lo haremos», señalan desde el Consistorio. Chueca ha criticado que Vox «está dirigido desde Madrid», aludiendo al adelantamiento electoral en Aragón.
Algo que niegan desde la formación local recordando que las relaciones con el gobierno del PP en Zaragoza se enfriaron en las fiestas del Pilar. «En octubre, el PP pasó todas las líneas rojas, cuando concedió el título de Hija Predilecta a Casa Palestina, funda y presidida por un terrorista islamista deportado», esgrime Vox, «incumpliendo además el reglamento».
Al PP le saltaron las alarmas en el último pleno, cuando Vox apoyó una iniciativa de la izquierda para retirar las competencias de la concejalía de Cultura que le permitían hasta ahora firmar convenios de colaboración con entidades y empresas sin contar con la aprobación del resto de formaciones.
De hecho, Vox anunció antes de conocer el adelanto electoral que presentaría un recurso ante el Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (TACPA) respecto a un convenio que había firmado entre la empresa pública Zaragoza Cultural y Boreal, a la que señalan de «chiringuito», donde se le cedía a ésta un espacio para un acto navideño sin cobrar entrada ni tasa para la prestación de servicios.
La formación de Abascal alerta que las sociedades municipales controlan el «15% del presupuesto municipal» y que se requiere «transparencia» ante actividades que suelen estar «ideologizadas».
«Creemos que se abre ahora un periodo nuevo en el que va a haber que abordar cambios estructurales muy importantes que no se han abordado en este ayuntamiento y creemos que hay que dar una vuelta de tuerca en la política de presión que ha estado llevando a cabo nuestro partido», ha reseñado Eva Torres, la concejal de Vox que ha llevado las negociaciones presupuestarias.
Torres se refería al gasto en el Ayuntamiento por parte de los populares, respecto al aumento de 50 millones de euros en gastos de personal y gasto corriente en bienes y servicios, con el impacto que tiene en la deuda municipal.
Por su parte, el PP tilda a Vox de ser una herramienta de la «izquierda» y ya ha anunciado que Zaragoza tendrá Presupuestos. «La ciudad no se puede parar», ha denunciado la alcaldesa, Natalia Chueca, al hacerse pública la posición de Vox.
«Esta decisión beneficia al PSOE y a Zaragoza en Común (ZEC) –los homólogos de Ada Colau–. Y también a Pilar Alegría», ha añadido la regidora popular. Por su parte, la candidata socialista al Gobierno de Aragón no ha tardado en anunciar su mano tendida al PP para negociar el Presupuesto con su formación para que «no esté maniatado a Vox».