Santi Vila: «Torra es un agitador pero Pedro Sánchez tiene la obligación de ponerse al teléfono»
El exconsejero de Empresa del Gobierno catalán ha sido uno de los políticos independentistas juzgados que se han librado de la condena por sedición. Santi Vila sólo ha sido condenado a multa de 10 meses con una cuota diaria de 200 euros y a una inhabilitación por un año y ocho meses por un delito de desobediencia.
Vila ha roto su silencio en una entrevista con Efe. El exconsejero desvela que sí que esperaba una condena dura contra los líderes del procés, pero no tanto porque «penas de 13 años por hechos que finalmente son descritos como una ensoñación… pues resulta paradójico justificarlo».
Él mismo relató durante el juicio que se les fue «de las manos»: «Tensamos la cuerda y al final se nos escapó de las manos y así hemos tenido que asumir las consecuencias». Unas declaraciones que, paradójicamente, construyen parte de la sentencia que condena a su excompañeros.
«Cuando se aprueban las tristes leyes, el Gobierno de Rajoy no toma la decisión de aplicar el 155; eso quiere decir que entre los dos gobiernos existía la intuición de que quizá in extremis seríamos capaces de evitar el choque», asegura Vila.
Además, vuelve a defender que él siempre trabajó por orden de su «amigo» Carles Puigdemont, para no descarrilar.
Críticas a Torra
Torra y Santi Vila no son amigos ni tienen contacto alguno. El exconsejero considera al actual presidente de la Generalitat un «gran desconocido» y reconoce que no empatiza con él, algo recíproco que se vio durante el juicio del procés.
El exconsejero cree que Torra «se mueve en una contradicción espiritual entre su alma como activista, incluso como agitador, y su alma como político o como máximo representante institucional de Cataluña».
Vila asegura que el presidente catalán está más cómodo con el papel de activista y además «le cuesta doblemente ser el presidente de todos y no solo de los independentistas». No llega a pedir su cese o dimisión, pero sí asegura que «el Govern necesita convalidación o reformación».
La actitud de Sánchez
Santi Vila tampoco tiene halagos para Pedro Sánchez. El exconsejero critica duramente que el presidente del Gobierno no le coja el teléfono a Torra porque, según defiende, no le llama la persona, sino el presidente de Cataluña.
«Guste más o guste menos, Torra es el presidente de la Generalitat, acaba de superar una moción de censura y en consecuencia, Sánchez tiene la obligación de ponerse al teléfono cuando le llama un presidente autonómico sea el que sea, del PP, del PSOE, o sea independentista, porque España no es un país militante», señala.
Para Vila es un «desacierto» que Sánchez no le coja el teléfono a Torra y dice que el presidente del Gobierno «ha gestionado los últimos meses la situación, movido mucho más por el tacticismo que por el sentido de Estado».