Sánchez ordena a Tezanos que enfríe el triunfo del PSOE para no desmovilizar a la izquierda
El PSOE teme que dar por hecho la victoria en las elecciones generales desactive la participación.
Las expectativas favorables ante el 28 de abril han traído al PSOE una preocupación: que estos datos tengan un efecto desmovilizador al dar el triunfo por seguro.
Los sondeos que más disparan el voto son, precisamente, los del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), en manos de José Félix Tezanos. En el último barómetro, de febrero, colocaba al partido de Pedro Sánchez con un voto directo del 33,3%, doblando a su directo competidor, el PP (16,5%), y 3,4 puntos por encima del mes anterior.
Desde que Tezanos asumió el mando de este organismo público, su encuesta siempre ha dado vencedor al PSOE, a distancia y sin parar de crecer. El mes pasado batió el récord. De ahí que desde los círculos próximos al presidente se haya trasladado la inquietud.
El ‘fantasma’ de Andalucía
Las alertas han saltado también entre los grupos parlamentarios, donde se advierte del riesgo, demostrado en diversas ocasiones, de que unas perspectivas disparadas acaben frustrando el resultado final. La número dos del PSOE, Adriana Lastra, recogió este lunes esa inquietud y recordó la «dolorosa experiencia» de las elecciones andaluzas del 2 de diciembre, cuando las encuestas se mostraban muy favorables. Cabe recordar, en este caso, que el propio CIS daba claro ganadora a Susana Díaz, con entre 45 y 47 escaños, más del doble que el resto de partidos. Además, auguraba un escaño para VOX, formación que irrumpió finalmente con doce.
«No nos podemos confiar ni la ciudadanía se debe confiar», avisó Lastra, que aprovechó para incluir uno de los mensajes de campaña del socialismo: el discurso del miedo. «Tenemos el fascismo a las puertas del Congreso», alertó.
Los expertos demoscópicos consultados por OKDIARIO confirman que la participación será clave para los comicios del 28 de abril. «La izquierda se ha movilizado por miedo a un escenario andaluz. Sin embargo, para la izquierda será clave mantener o aumentar la movilización, que quizás podría desinflarse al final», afirma José Manuel San Millán, analista de Target Point.
En este sentido, San Millán apunta a que la clave, para centro y derecha -que observa «hipermovilizada»- estará en los indecisos, especialmente los primeros votantes, y las generaciones de entre 35 y 45 años. El PSOE, por su parte, depende también de la movilización de Podemos. Los socialistas necesitan que la formación de Iglesias no baje de los 40 escaños.
Más allá de los resultados, los pactos se arrojan imprescindibles en un Parlamento fragmentado a izquierda y derecha. En el PSOE, los mensajes, en este sentido, apuntan como preferencia clara hacia Ciudadanos, un partido que ha negado cualquier posibilidad de gobierno con Sánchez. Esta opción, revelada por el ministro de Fomento y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, es la preferida en los círculos internos del partido.
La formación prefiere insistir en que Sánchez gobernará en solitario -algo que presumen imposible si el acuerdo es con Iglesias- y que se intentarán alianzas con todos.
«Si ganamos el 28 de abril interpelaremos a los 350 diputados de la Cámara para que apoyen las medidas de progreso que aparecen en nuestro programa electoral», aseveró Lastra.