Sánchez excluye a Podemos de la ley de Seguridad Nacional que le dará todo el poder en casos de crisis
El texto de la futura ley de Seguridad Nacional de Pedro Sánchez es todo un monumento a la acumulación de poder excepcional en manos del Gobierno. Pero el presidente no la ha planteado para compartir ese poder. Lo cierto es que Sánchez excluye a Podemos en su norma para poder controlar España en exclusiva aprovechando las situaciones de urgencia nacional.
La norma remite a dos organismos de forma notable. En primer lugar, al Departamento de Seguridad Nacional, que “ejercerá las funciones de secretaría técnica y órgano de trabajo permanente del Consejo de Seguridad Nacional y de sus órganos de apoyo”. Además, “actuará como órgano que integre la información proporcionada al Sistema de Seguridad Nacional para el cumplimiento de las funciones previstas”. Y ese organismo no cuenta con los ministerios en manos de Podemos.
Es más, hay una fase previa de cara a la preparación de los esquemas necesarios para, en caso, de urgencia nacional, poder aplicar de inmediato la norma de Sánchez. La norma lo define en el apartado dedicado a “la Reserva Estratégica basada en las Capacidades Nacionales de Producción Industrial”. Ahí se establece “dentro del marco de contribución de recursos para la seguridad nacional, una Reserva Estratégica basada en las Capacidades Nacionales de Producción Industrial (en adelante, RECAPI) que, de forma adaptable y escalable, asegure una producción industrial que permita a las Administraciones Públicas cumplir con las obligaciones establecidas”.
Esta “RECAPI tiene por objeto facilitar la producción de los recursos, bienes y tecnologías que permitan mitigar la dependencia exterior de aquellos recursos de primera necesidad o de carácter estratégico, con el fin de mantener la eficacia del Sistema de Seguridad Nacional y proteger la libertad, los derechos y el bienestar de los ciudadanos”. Es decir: es la base de los preparativos previos a una situación de urgencia nacional.
Pues bien, la RECAPI deberá ser aprobada por Real Decreto del Consejo de Ministros, a propuesta del Consejo de Seguridad Nacional, mediante un reglamento por el que se regularán sus obligaciones, facultades y funcionamiento, así como las del Centro de Coordinación y Promoción de la Industria Estratégica.
Ministros de Podemos sin peso
Y, de nuevo, y hasta aquí, todo recae en los mismos ministerios con peso y presencia en el Consejo de Seguridad Nacional, donde no están los ministerios en manos de Podemos. La vicepresidencia de Yolanda Díaz sí accede al Consejo, pero los preparativos de la RECAPi se le escapan y su peso queda totalmente diluido en el Consejo de Seguridad Nacional.
Por último, el mencionado Centro de Coordinación y Promoción de la Industria Estratégica aparece igualmente regulado. Por ello, se deberá constituir “el Centro de Coordinación y Promoción de la Industria Estratégica que, bajo la dependencia funcional del Consejo de Seguridad Nacional e integrado orgánicamente en el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo”, de forma que sea el “órgano encargado de la gestión ordinaria de la Reserva Estratégica basada en las Capacidades Nacionales de Producción Industrial”. El Ministerio de Industria recae en Reyes Maroto, de nuevo, una socialista.
Además, este Centro “estará presidido por el Secretario General de Industria y Pequeña y Mediana Empresa, e integrado por miembros que, con rango de director general u oficial general, serán designados por los Ministerios y organismos representados en el Consejo de Seguridad Nacional”.
Traducido: de nuevo, nulo poder para Podemos.
Y las funciones preparatorias de este organismo serán amplias: “Identificación de los medios de producción industrial y sus tecnologías asociadas, para satisfacer la producción y el acceso a suministros, bienes y recursos de primera necesidad o de carácter estratégico”; “definición, evaluación y planificación, a través de la industria, de las capacidades de producción industrial de recursos, bienes y tecnologías que se consideren de primera necesidad o de carácter estratégico”; “coordinación y disposición de la RECAPI que, de forma adaptable y escalable, garantice el suministro de aquellos medios y recursos de primera necesidad y carácter estratégico que considere el Consejo de Seguridad Nacional”; “elaboración de propuestas normativas, estudios e informes para el fortalecimiento del Sistema de Seguridad Nacional en el ámbito de la Industria Estratégica y de sus capacidades de producción”; y, entre otras, “el apoyo, el asesoramiento y la información al Consejo de Seguridad Nacional en la toma de decisiones sobre las materias propias del ámbito de la industria estratégica y de sus capacidades de producción”.
Traducido, en cualquiera de las fases de aplicación de la ley -preparatoria y de ejecución en caso de urgencia nacional-, Podemos no tendrá poder real con esta norma de Pedro Sánchez diseñada para disparar su control de España.