Los pactos socialistas incluyen separatistas de toda España: PNV, ERC, JxCAT, Més, BNG y abstenciones de Bildu

PSOE
Pedro Sánchez
Carlos Cuesta

El PSOE que pide la abstención del PP y C’s para investir a Pedro Sánchez tiene alianzas en 47 municipios con formaciones golpistas separatistas: ERC y JxCAT. Pero su cuadro de pactos con partidos populistas que defienden la convocatoria de un referéndum de autodeterminación y que cargan abiertamente contra de la unidad de España es aún mayor.

A día de hoy, hay 4 gobiernos regionales en los que el Partido Socialista ha pactado con Podemos o sus marcas regionales; hay 10 capitales de provincia y 10 diputaciones o gobiernos insulares en los que se da la misma situación. Las alianzas del PSOE para formar gobiernos locales o regionales suman todo tipo de nacionalistas: Més, PNV, Geroa Bai, ERC, JxCAT, o BNG. Y ello sin contar el logro indirecto de la abstención de los proetarras de Bildu, tanto para la investidura del propio Pedro Sánchez como del Gobierno socialista de Navarra.

Los pactos del PSOE con formaciones separatistas son largos de enumerar. Manda en las Islas Baleares con Unidas Podemos, Més, MXME y GXF. Més es un partido declaradamente separatista y Podemos es un partido que no ha dejado de posicionarse a favor de la convocatoria de referéndums en contra de la unidad de España.

El PSOE también está cerrando pactos en Navarra con Geroa Bai, Podemos e IE-IU, y la abstención de la formación proetarra EH Bildu. Geroa Bai lleva inmerso al PNV, partido que tramita en estos momentos un Estatuto Vasco de Autonomía que recoge su autodeterminación y la futura absorción de Navarra.

El PSOE igualmente puede mandar en Aragón con los votos de Podemos, el PAR y la Chunta Aragonesista (CHA) o con el PAR y C’s. La CHA igualmente es nacionalista.

Aliados de Colau, ERC y JXCat

En Barcelona los socialistas van a repetir el esquema con Ada Colau (Barcelona en Comú) y el apoyo de Manuel Valls. El Gobierno local de Colau se declaró favorable al 1-O y uno de sus tenientes de alcalde -Jaume Asens- está grabado por la Guardia Civil en la instrucción del 1-O mostrando la postura favorable del Ayuntamiento al uso de sus locales públicos para el referéndum ilegal del 1 de Octubre.

Otras formaciones nacionalistas como el BNG también figuran en su larga lista de apoyos contrarios a la defensa de la unidad de España. Así ocurre en las ciudades de La Coruña, donde pactan con Marea Atlántica y BNG. O en Lugo y Pontevedra. Así pasa con otros separatistas como el PNV en Bilbao o San Sebastián.

Y esa escena se repite no sólo en ciudades y comunidades autónomas. También en diputaciones y gobiernos insulares. Porque pacta en estas entidades con Podemos y sus marcas blancas -que defienden el mal llamado “derecho a decidir”- en Zaragoza, Teruel, Valencia, Castellón, Mallorca, Menorca, Formentera, Córdoba, Cádiz o Fuerteventura. Y lo hace con JxCAT en Barcelona, con BNG en la Diputación de La Coruña y Lugo.

Todo ello sin contar los pactos municipales con el populismo de extrema izquierda de Podemos y sus marcas blancas en plazas como Valencia, Castellón, Logroño, Burgos, Palma de Mallorca (también con Més), Las Palmas de Gran Canaria, o Santa Cruz de Tenerife.

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