Montoro: «Hemos salido de la crisis de la borrachera del gasto público y ya quieren ir de copas para celebrarlo»
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha apelado insistentemente a la responsabilidad de los grupos políticos para que respalden la aprobación de los Presupuestos. El Gobierno busca que los partidos se «retraten» en su rechazo a las cuentas, al vincularlas al crecimiento económico y la creación de empleo.
Ese ha sido el principal argumento en el que Montoro ha vertebrado su intervención este miércoles, en la primera sesión en el Congreso. El apoyo de Ciudadanos, PNV y Coalición Canaria, 175 escaños, permite al Ejecutivo superar el primer trámite presupuestario, el de las enmiendas a la totalidad, aunque para su aprobación definitiva precisará de un voto más, que negocia con el diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo. «Estos son los Presupuestos del empleo y el gasto social», ha resumido Montoro.
El ministro ha apelado con insistencia al PSOE, y al interés de los barones socialistas que gobiernan en las comunidades autónomas en que las cuentas salgan adelante. Así, ha desmontado el criterio de quienes consideran que los Presupuestos «maltratan» a las regiones destacando la inversión autonómica de 5.400 millones de euros. Montoro ha reprochado que quienes niegan el apoyo a los Presupuestos por «criterios ideológicos» lo hacen también a más inversión en políticas sociales.
El titular de Hacienda ha resumido en tres los objetivos presupuestarios- creación de empleo y reducción de déficit y deuda pública- y ha insistido en su urgencia para consolidar las cifras macroeconómicas. Así, ha significado la bonanza económica en que «a nadie le está yendo mejor que a España». «Luego algo bueno estamos haciendo cuando crecemos el doble de la media europea y estamos creando prácticamente la mitad de empleo de la UE», ha resumido el ministro, que ha advertido de que «España necesita crecer, que necesitamos más renta para que haya igualdad y más oportunidades de empleo».
Montoro ha fijado el gran reto del Gobierno: que a finales de legislatura haya 20 millones de personas trabajando y ha ilustrado en las personas que han salido del desempleo como «el mejor ejemplo de que la política económica del Gobierno funciona».
El ministro- que ha indicado que las cuentas tendrán una vida útil de seis meses- ha señalado que el Gobierno también es consciente de que «no se la juega con la presentación de estos Presupuestos», que -en su opinión- servirán para que esta legislatura pueda sacudirse cualquier sospecha de incertidumbre y ha asegurado que estos presupuestos no deben servir para confrontaciones «maniqueas».
«Ni séptimo cielo ni siete plagas», ha dicho, tras pedir que el debate no se produzca con el fin de vencer y que «más allá de criterios ideológicos España avance en su prosperidad».
«Gastar más, no, gastar mejor»
El ministro ha insistido en la obligación de reducir el déficit público, pero ha añadido que el compromiso del Gobierno «no es solo con la UE, sino con todos los españoles».
Así, Montoro se ha preguntado si «ha llegado el momento de quitarse el corsé de la austeridad» y «darse una alegría presupuestaria». «Ante la cuestión de gastar más, está la respuesta de gastar mejor», se ha respondido.
«Hemos salido de la crisis de la borrachera del gasto público y ya quieren ir de copas para celebrarlo», ha ironizado. Montoro ha afeado así la gestión de la crisis del Gobierno de Rodríguez Zapatero, cuando, ha dicho, «se gastó a toda máquina sin pensar que aquello podía descarrilar».
El ministro ha destacado además el esfuerzo del Gobierno por incrementar la cuantía de las pensiones y ha advertido de la necesidad de asegurar su sostenibilidad «basada en el empleo y en el aumento de la cotización a la Seguridad Social».