LA ENTREGA DEL SÁHARA A MARRUECOS

Mohamed Vl fuerza a Sánchez a viajar ya a Rabat al ver que no tiene apoyos en su giro sobre el Sáhara

Mohamed VI y Pedro Sánchez.
Mohamed VI y Pedro Sánchez.
Joan Guirado

En el argot diplomático seria una llamada a consultas en toda regla. Pero en lugar de reclamar a su embajador que se desplace a su país de origen, por un conflicto entre países, lo que hace el rey de Marruecos, Mohamed Vl, es forzar a Pedro Sánchez que le visite en Rabat. Para hablar cara a cara. La constatación por parte de Mohamed Vl de que Sánchez está solo en este giro histórico no ha gustado en Marruecos. Porque si en unos meses tiene que abandonar el Gobierno, el acuerdo queda en papel mojado.

Este jueves, dos semanas más tarde de la carta que le remitió el presidente en la que reconocía su cambio de posición respecto a la independencia del Sáhara, el monarca llamó a Moncloa para hablar con el jefe del Ejecutivo. Y le exigió -aunque luego lo vendieran como una invitación- que se desplazase a la capital del país lo más pronto posible.

Para obligarle a avanzar este viaje, que tal como relató OKDIARIO esta semana de fuentes gubernamentales no se iba a celebrar antes de mayo para dar aire al cabreo de sus socios y por el Ramadán, el rey de Marruecos canceló la agenda oficial que tenía el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación José Manuel Albares este viernes en la capital. El jefe de la diplomacia española iba a preparar la visita de Sánchez. Ahora acudirá junto a él, previsiblemente a finales de la semana que viene. Albares tenía una recepción en la Embajada de España en Rabat con más de mil invitados y decenas de periodistas españoles, desplazados al uso, le esperaban en la capital marroquí.

Las explicaciones en el Congreso

La cuestión que llevó al Rey de Marruecos a descolgar el teléfono para llamar a Sánchez fue lo constatación de que el presidente estaba solo en el cambio de posición respecto al reconocimiento sobre la independencia de Marruecos. Moncloa había trasladado a Rabat que era una postura de país, que sería respetada en el tiempo. Pero la falta de apoyo principalmente del Partido Popular, que es la alternativa de gobierno al PSOE, encendió las alarmas en la Casa Real de Marruecos. Y obligó a Mohamed Vl a mover ficha y forzar una reunión urgente para tener las garantías que él no le da a España sobre el reconocimiento de la españolidad de Ceuta, Melilla y Canarias.

El viaje de Albares

El ministro José Manuel Albares tenía previsto viajar este mismo viernes a Rabat. Allí le esperaban alrededor de veinte periodistas qué habían viajado ayer desde Madrid y mil invitados que iban a ser recibidos por el jefe de la diplomacia española en la sede de la Embajada. Pero alrededor de las siete de la seis de la tarde la llamada de Mohamed Vl a Pedro Sánchez lo truncó todo. El gobierno marroquí cancelaba la agenda oficial junto al ministro español y este se veía obligado a cancelar -fuentes de Moncloa piden usar el término posponer «ya que es muy distinto en temas diplomáticos»- su viaje. Aunque la misión principal era preparar el que, inicialmente en mayo y ahora la semana que viene, va a realizar Sánchez. Viajarán juntos.

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