Lastra y Montero hablarán esta tarde tras el fracaso de la reunión entre Sánchez e Iglesias
Las portavoces parlamentarias del PSOE y Unidas Podemos recuperarán el diálogo pese a que sus equipos reconocen que las posiciones están muy lejos de llegar a un acuerdo.
Sánchez e Iglesias no llegan a ningún acuerdo y se culpan de buscar elecciones
Las portavoces del PSOE y Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, Adriana Lastra e Irene Montero, intentarán retomar las conversaciones que se rompieron ayer tras más de dos horas de reunión entre el presidente en funciones, Pedro Sánchez, y el secretario general de Podemos ,Pablo Iglesias.
Según ha podido saber OKDIARIO, a doce días para que empiece el debate de investidura, Lastra y Montero mantendrán hoy una conversación telefónica que permita encauzar la situación y poner a trabajar los equipos negociadores de ambos partidos, algo a lo Iglesias se negó ayer en redondo.
La relación entre el PSOE y Podemos no pasa por su mejor momento. De hecho, en uno y otro partido, dicen que esa relación a día de hoy no existe, tras el fracaso de la reunión de ayer entre Sánchez e Iglesias.
Tras el encuentro, socialistas y podemitas se acusaron de mentir e incluso llegaron a filtrar contenido de la reunión que negaba una de las partes, algo que dinamita la poca confianza que ya había entre los dos actores.
Por ese motivo que, sin tiempo que perder, Lastra y Montero quieren continuar hablando con mayor discreción y un perfil más bajo para encontrar un principio de acuerdo que permita sentar a los dos equipos que deben negociar el futuro Gobierno de cooperación.
Fuentes socialistas reconocen que, tras las declaraciones de varios dirigentes de Podemos en los últimos días, poniendo en boca de Sánchez cosas que el jefe del Ejecutivo no había dicho, todo lo que se hable ahora se hará con mucha cautela.
Desde la formación de Pablo Iglesias se llegó a decir que no confiaban en el presidente en funciones, algo que ha provocado irritación en Ferraz y en La Moncloa, que ven difícil tejer así una relación de confianza y complicidad que les permita trabajar conjuntamente, cuando discrepan e incluso hablan mal de Pedro Sánchez en público. En el PSOE recuerdan que la formación de Gobierno es competencia exclusiva del Presidente y que en ella debe primar «la confianza».