Una asesora de Irene Montero critica «la pobreza de tiempo» por tener que trabajar todo el día
Alba González Sanz, escritora, feminista y actualmente asesora de Irene Montero en el Ministerio de Igualdad, ha criticado «la pobreza de tiempo», un concepto que asocia con que muchas mujeres tienen que trabajar todo el día y no tienen tiempo para descansar.
Así lo ha expuesto en una charla titulada ‘El impacto de la pandemia con perspectiva de género’, organizada por la escuela de formación de Podemos. Esta asesora iba a ser la directora general de Igualdad de Trato y Diversidad Étnico Racial hasta que llegó Rita Bosaho, activista de origen ecuatoguineano, que ocupó el puesto finalmente. No obstante, González Sanz continúa en el Ministerio como estrecha colaboradora de Irene Montero.
«Vivimos en un país que tiene unos horarios completamente irracionales. Esto lo repite y lo explica muy bien la ministra Irene Montero. Si no reflexionamos sobre los usos del tiempo y sobre esa pobreza de tiempo que tenemos las mujeres, mal vamos», critica esta asesora.
«Con un sistema en el que estás trabajando casi hasta que cae el sol y con muy poca lógica de vida sino de producción, pues es muy difícil», lamenta para agregar que esa «pobreza de tiempo» impide «que todas las medidas para facilitar la corresponsabilidad y para facilitar los cuidados que impulsan las administraciones sean algo común y de todas y todos».
De esta forma, esta filóloga hispánica de formación experta en Igualdad de Género y Diversidad se alinea con Irene Montero cuando en una entrevista, mientras criticaba a los hombres, subrayaba que «las mujeres también tienen derecho a tumbarse en el sofá para ver una película».
La ministra reivindicó el derecho de las mujeres «a dedicarse tiempo a sí mismas», poniendo como ejemplo «tumbarse en el sofá y ver una película» o «quedar con unas amigas» para así «realizarse como persona». La dirigente de Podemos enfatizó su objetivo de mejorar la conciliación laboral en España con motivo de la pandemia del coronavirus y «restar carga en los hombros de las mujeres» en las tareas domésticas y de cuidados. Para ello no ha dudado en atacar indirectamente a los hombres.
«Las mujeres también tienen derecho a dedicarse tiempo a sí mismas. Ya sea a tumbarse en el sofá y ver una película, a tener cualquier tipo de actividad de ocio o simplemente de descanso y de cuidado de su propio cuerpo y de sí mismas, quedar con unas amigas y de realizarse como persona. En esos usos del tiempo, las mujeres son mucho más pobres de tiempo que los hombres, tienen mucho menos tiempo disponible para hacer las cosas que quieren», desarrolló en La Cafetera.
«Hay que empezar a trabajarlo, cuánto tiempo dedicamos a trabajar, al ocio, al cuidado de las personas que queremos. Todo eso creo que son debates que nuestra sociedad tiene que dar porque al final es la clave de que las personas puedan desarrollar sus proyectos vitales y ser felices», afirmó este miércoles en una entrevista en el programa de Radiocable.
200 millones
En esta misma línea, Alba González desarrolla diversas medidas para conseguir que las mujeres trabajadoras tengan que trabajar menos. Señala en particular que los Presupuestos Generales del Estado de 2021 incluyen un programa piloto de nombre Plan Corresponsables, dotado con 200 millones de euros para ofrecer soluciones de conciliación a las familias con hijos menores de 14 años.
En este sentido, la asesora de Igualdad quiere subrayar que una de las prioridades de Podemos es implantar un Sistema Nacional de Cuidados. Una de las patas de esta iniciativa es el plan de 200 millones para, entre otras cosas, crear una «bolsa de cuidado profesional» en cada región, con la que se brindarán servicios de cuidado a domicilio por horas, además de actuaciones específicas orientadas a fomentar la corresponsabilidad entre mujeres y hombres en familias y empresas. La mayor parte (190 millones) irán a las comunidades autónomas y los 10 millones restantes serán para gastos de funcionamiento y gestión.
En este marco, esta asesora ministerial subraya lo necesario que es «un enfoque de género en el diseño de políticas públicas para salir de la crisis de la Covid-19?». Apuesta por «caminos posibles para salir de esta crisis sin que, como sucede históricamente, la igualdad y los derechos humanos de las mujeres se esfumen».
Así mismo, suscribe que es «la hora de equiparar económica y académicamente los cuidados», es decir, que las madres por hacer de madres tengan contraprestaciones económicas. Además, valora positivamente la labor de «las redes solidarias de apoyo».
Por otra parte, llama la atención que Alba González considera que el feminismo no debe ser excluyente con los hombres. Considera que es la ideología que, más allá de la lucha de clases, puede mejorar la vida de toda la población ya que incorpora a ellos y ellas. Indica que las feministas sí deben apelar a los hombres para que ellos se hagan cargo de los cuidados.