El INE revela 5.237 muertos que el Gobierno no cuenta desde que impuso el 2º estado de alarma
El Instituto Nacional de Estadística (INE) revela un ‘exceso’ de 5.237 muertos con respecto a los registros de fallecidos por coronavirus del Ministerio de Sanidad desde el pasado 25 de octubre, cuando el Gobierno de Pedro Sánchez impuso su segundo estado de alarma. Un decreto que, a la vista de la situación epidemiológica, se ha demostrado fallido.
En su ‘Estimación del número de defunciones semanales durante el brote de Covid-19’, el organismo público recoge que, entre la semana 44 y 53 de 2020, se produjo una diferencia de 21.043 fallecidos con respecto al mismo periodo del año anterior. El INE, cabe recordar, no diferencia entre las causas de la muerte, aunque por lógica cabe entender que la inmensa mayoría fueron atribuibles a la pandemia.
Por su parte, el Ministerio de Sanidad, en sus balances diarios, reporta 15.806 muertes para el mismo periodo, 5.237 menos que el INE.
Las dudas sobre el número real de fallecidos durante la pandemia ha sido y es una de las grandes cuestiones a las que el Gobierno de Pedro Sánchez sigue sin responder.
Sin ir más lejos, la pasada semana, el INE ya revelaba un ‘exceso’ en el número de defunciones registradas entre marzo y diciembre del año pasado de 80.203 personas, una diferencia de 30.081 muertes respecto al balance oficial del Ejecutivo. Según la estadística de defunciones de este organismo, entre mediados de marzo y finales de diciembre de 2020 fallecieron en España 391.399 personas, frente a las 311.196 que murieron en el mismo período de 2019.
Cabe señalar que el Ministerio de Sanidad sólo contabiliza como fallecidos por coronavirus aquellos cuyo diagnóstico haya sido confirmado mediante una prueba PCR o test de antígenos, lo que deja fuera a aquellos con sospecha de la enfermedad. Esto ha provocado que numerosas defunciones ocurridas especialmente en los primeros momentos de la pandemia no hayan sido consideradas.
El INE ya dejó en evidencia a Sánchez cuando reveló que, de enero a mayo de 2020, el 93% del ‘exceso’ de muertes se debió al coronavirus. Un total de 45.684 fallecimientos. Según esta estadística, sólo entre el 30 de marzo y el 5 de abril se produjeron 20.767 muertes y un ‘exceso’ de 12.680 con respecto al mismo periodo del año pasado. De ellas, 5.890 eran casos confirmados de Covid.
El Ministerio de Sanidad recoge en estos momentos 55.041 fallecidos por coronavirus en España. Una cifra que se queda muy lejos de las estimaciones de otros organismos, como el sistema de vigilancia de la mortalidad, MoMo, del Instituto de Salud Carlos III. Como reveló OKDIARIO, el INE también refleja un ‘exceso’ de 50.581 fallecidos desde el pasado 9 de abril, cuando Pedro Sánchez proclamó eufórico en el Congreso: «El incendio que desató la pandemia empieza a estar bajo control».
Estado de alarma
Sánchez impuso el pasado 25 de octubre un nuevo estado de alarma, inédito por su duración (seis meses) y porque eludía el obligado control por parte del Congreso de los Diputados.
Sin embargo, los datos han revelado lo fallido de una estrategia que el Gobierno se niega a modificar pese a la grave situación epidemiológica. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, rechazó el pasado miércoles el clamor de las comunidades autónomas -incluidas varias gobernadas por el PSOE -para que se les dote de nuevas herramientas y medidas más severas, como un adelanto del toque de queda. Illa aseveró que las actuales medidas son suficientes y pidió tiempo para notar sus efectos. Mientras, las cifras, día tras día, siguen siendo dramáticas. Los contagios están al alza, y alcanzan cifras de récord.
Las regiones, ante la pasividad del Gobierno, han endurecido sus recomendaciones a los ciudadanos. Los Gobiernos de Andalucía y Castilla y León han pedido extremar las precauciones y no salir a la calle a partir de las 8 de la tarde.
El responsable del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias (CAES) Fernando Simón -que en las últimas semanas ha echado la culpa a los propios ciudadanos del aumento de contagios por su comportamiento durante las Navidades- afirmó el jueves, en pleno récord de casos, que «la incidencia sigue creciendo, pero los incrementos son cada día más pequeños» lo que, según Simón, «indica que estamos en la parte de inflexión».
En otro de sus pronósticos, que en otras ocasiones se han revelado fallidos, ha asegurado que dicha tendencia se podría empezar a apreciar en la evolución hospitalaria a mediados de la semana que entra.