La deuda y los malos resultados electorales ahogan a ICV y presenta un concurso de acreedores

Marta Ribas, coordinadora de ICV. @Getty
Marta Ribas, coordinadora de ICV. @Getty

ICV ha decidido acogerse al concurso de acreedores. La formación ecosocialista está ahogada por las deudas –que ascienden a 10 millones de euros–, una situación financiera que se agrava, además, por los malos resultados electorales porque tienen menos asignación de dinero público.

En un comunicado, el partido ha informado de que en los próximos días formalizarán el proceso y ha explicado que ICV «no se encuentra en una situación de insolvencia actual», pero que el análisis de la situación económica permite prever que esta posibilidad se produzca. La Ejecutiva de ICV ha decidido presentar el concurso voluntariamente para evitar una «situación de degradación».

ICV está integrada en Cataluña en Comú, la confluencia de izquierdas que agrupa a los ecosocialistas con los comunes de Ada Colua y con EUiA, y que mantiene una coalición con Podemos. La deuda asciende a alrededor de 10 millones de euros, un pasivo que desde la formación han intentado mitigar con la venta de su sede en la Ciudad Condal, un local amplio en la calle Rellotge, aunque no lo han conseguido, según afirma ‘La Vanguardia’.

Malos resultados de los últimos comicios tras la integración con los comunes han hecho baja los ingresos propios como partido o la deuda acumulada hace que muchos vean el «fin» de la formación.

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