La CUP y ANC tratan a su gente como borregos: les dan plantillas de tuits para apoyar hoy a Puigdemont

Los comités de defensa de la república (CDR) de las CUP, la ANC y Òmnium Cultural han convocado hoy a sus seguidores y simpatizantes para manifestarse frente al Parlamento catalán en defensa de una investidura de Carles Puigdemont. Y en una demostración de la forma que tienen ellos de tratar a sus propios seguidores, les han enviado ya plantillas con los mensajes que deben enviar.

Como si se tratase de borregos, les han remitido, a través de mensajes internos o redes sociales los lemas que deben reenviar a través de las redes sociales, de forma que, sin necesidad de pensar, tengan ya las consignas y, además, consigan coordinarse para colarse en la lista de TT -trending topics-, aparentando ser un movimiento más voluminoso de lo que realmente son.

Así, los CDR organizadores les han enviado ya plantillas para poder reenviar mensajes simplemente cortando y pegando los textos. Y han dado el encargo –por no decir la orden– de reenviar de forma sistemática los tuits para generar mucho ruido social y dar una sensación de que son la mayoría de los catalanes los que respaldan al golpista Puigdemont.

Los CDR, de este modo, han enviado en los últimos días plantillas en las que se pueden leer las órdenes dadas a sus seguidores. Mandatos como “utilizad conceptos como defender las instituciones, democracia, no violencia, soberanía, 1-O, República, empoderamiento, autoorganización, CDRs, etc.”.
Y donde se les encarga de generar “tuits con la etiqueta” y de retuitear “los que hay hechos”.

Los textos preparados para el ‘corta y pega’ incluyen, de forma numerada -por si alguno se pierde-, con el numero uno “#ElPoderDelPoble implementaremos la República en la que queremos vivir. Estamos dispuestos a defenderla y no queremos esperar más!”. También y con el número dos, “No tengamos ninguna duda, con #ElPoderDelPoble hicimos posible el 1 de octubre y será nuestra fuerza para construir la República”.
El tres señala que “Los CDRs hemos demostrado #ElPoderDelPoble y la voluntad de hacer efectivo el mandato democrático. Hacemos de la República una realidad!” -un lema donde, además, son los propios responsables de los CDR los que se hacen publicidad”.

El cuatro dice “#ElPoderDelPoble son las asambleas en cada barrio, pueblo, ciudad, comarca que nos permiten construir juntas la República!”. Y así hasta llegar a diez mensajes para ir repartiendo a lo largo de la jornada.
“Defendimos las urnas con nuestros propios cuerpos”, “el poder del pueblo es respetar la democracia y defenderla”, “el poder del pueblo somos todas y cada una de nosotros defendiendo la República ganada en las urnas”, etc.

Hasta acabar con un “Desde abajo, #ElPoderDelPoble es imparable!”
Una versión –estilo rebaño– con la que aspiran a colarse como uno de los eventos más comentados del día en las redes sociales y, de ese modo, hacerse publicidad más tarde afirmando que son una mayoría y que por eso consiguen esa movilización. Cuando lo cierto es que cualquier movilización libre tiene difícil superar un coro orquestado por la sencilla razón de que los mensajes se dispersan debido a la variedad de mensajes. Nada nuevo.

Más allá de esta colección de topicazos para repetir masivamente, la ANC ha remitido un texto interno para que sus organizadores sigan un eje de actuación. En ese mensaje se aclara que “Roger Torrent, el presidente del Parlamento, ha convocado el martes a las 3 de la tarde el pleno del debate de investidura, que debe servir para ratificar Carles Puigdemont como presidente de Cataluña”. En él se reitera que se “convoca a toda la ciudadanía de Cataluña a manifestarse masivamente, de forma no violenta, junto al Parlamento”, para “hacer respetar el voto de los catalanes” y “defender el derecho de Carles Puigdemont a ser investido presidente”.

Porque, según su versión, “no hay nada más dulce que querer ganar la libertad. Hemos votado y ahora elegimos!”, mensajes todos ellos que dejan claro que no reconocen la legalidad, cuestión que el Tribunal Supremo podrá tener en cuenta a la hora de decidir el futuro trato penitenciario a su líder Jordi Sánchez.