Los CDR de la CUP aprovechan los registros de la Guardia Civil a Ómnium y ANC para ganarse la calle
Los Comités de Defensa de la República (CDR) han visto en la llamada a la tranquilidad de la ANC y Òmnium Cultural su oportunidad para ponerse al frente de la movilización golpista en Cataluña. Tras los registros de la Guardia Civil de este miércoles en las sedes de las dos plataformas civiles del separatismo, la CUP de los ‘Países Catalanes’ ha llamado a sumarse a las convocatorias de los CDR «para mostrar su rechazo a la represión sufrida».
Con ese objetivo, estos grupos de intimidación y agitación de las calles creados por los antisistema han convocado concentraciones frente a las Delegaciones de Gobierno en Barcelona, Tarragona, Lérida y Gerona.
⏩Aquesta tarda ens sumem a les convocatòries impulsades pels CDRs de Catalunya per mostrar el nostre rebuig a la repressió patida avui.
🕰️20h davant de les Delegacions del Govern. #SensePor
🚩Barcelona, Tarragona, Lleida, Girona pic.twitter.com/FJ40nL24o4— CUP Països Catalans (@cupnacional) 24 de enero de 2018
Las células de agit-prop que en un inicio se crearon para vigilar votos y votantes a favor de la secesión el 1-O mantienen una tensión creciente con los brazos civiles del golpe de Estado en Cataluña. Diferencias que se han visualizado con motivo de la operación policial en busca de correos electrónicos que se habrían intercambiado los líderes de la ANC, Jordi Cuixart, y de Òmnium, Jordi Sánchez con la Generalitat de Carles Puigdemont para ultimar la intentona de secesión.
Desobedecer y volver a las calles
Así, mientras el vicepresidente de la ANC, Agustí Alcoberro, ha asegurado ver “normal” la actuación de la Guardia Civil, con un mensaje de calma al que se ha sumado Òmnium pidiendo «que no se desplace nadie», la CUP y los CDR han llamado a la movilización. Los antisistema y su organización juvenil, Arrán han instado a la «desobediencia», a «volver a las calles» y a advertir que es «el momento de los CDR».
📽️ @AgustiAlcoberro Aquest bolcatge de correus és un procediment que forma part del procés judicial i no implica cap novetat. Cal donar un missatge de tranquil·litat. Per això demanem que la gent no es desplaci davant la nostra seu. Calma i confiança. #SomGentDePau pic.twitter.com/IndlIkAEGU
— Assemblea Nacional (@assemblea) 24 de enero de 2018
👉 Cal que recuperem de forma URGENT l’esperit desobedient que va fer possible l’#1O, el #3O i el #8N. Tornem als carrers! #sensepor pic.twitter.com/LCiPvT86JT
— Arran💡 (@Arran_jovent) 24 de enero de 2018
Los CDR rechazan «la represión española»
Los cachorros de la CUP han pedido salir a las calles de forma «urgente» y «sin miedo». Y lo han hecho sin remilgos, con sus CDR animando a acudir a la Delegación de Gobierno o a las propias sedes de ANC y Òmnium. Un ejemplo, la convocatoria lanzada por el CDR del barrio del Ensanche.
Solidaritat contra la repressió!
La Guàrdia Civil està registrant les seus d’Omnium i ANC. Des del CDR Eixample Dret convoquem a mostrar el nostre rebuig a la repressió espanyola!
Tothom a:
👉 c/ Diputació 276 (Omnium)
👉 c/ Marina 315 (ANC)— #CDR Eixample Dret 🎗 (@CDREixampleDret) 24 de enero de 2018
Una llamada que ha argumentado la portavoz de Arran, Mar Ampurdanés, quien se ha sumado desde Twitter al llamamiento a recuperar la presión callejera: «Si dejamos de salir a defendernos por miedo a la represión, habrán ganado. ¡Responderemos a cada ataque desde las calles! Por los Jordis y por todos los presos políticos, la República se construye haciendo frente».
Si deixem de sortir a defensar-nos per por a la repressió, hauran guanyat. Responem a cada atac des dels carrers! Pels Jordis i per totes les preses polítiques, la República es construeix plantant cara.
— Mar Ampurdanès 🗝 (@MarAmpurdanes) 24 de enero de 2018
Puesta en escena o no, lo cierto es que la operación policial contra la ANC y Òmnium Cultural, que entre otros objetivos persigue demostrar cómo ambas plataformas golpistas fueron financiadas por el ‘Govern’ del prófugo Puigdemont, de momento se traduce en una diferencia de estrategia entre estas entidades y los antisistema de la CUP y sus terminales juveniles y de intimidación en las calles de Cataluña.