Casado: «¿Qué narices es eso del conflicto político? ¿Qué conflicto tienen los que van escoltados?»

Rotundo, Pablo Casado ha desmontado a Pedro Sánchez encarándolo con sus propias afirmaciones. Cuando aseguró, sin ir más lejos, que no dormiría tranquilo con Podemos en el Gobierno. Ni el 95% de los españoles tampoco. «Entre colchones e insomnios nos trae aquí un gobierno de pesadilla. Este gobierno será su epitafio político», ha empezado disparando el líder del PP.

En una intervención sincera y apasionada, Casado ha desbaratado, una a una, las excusas de Sánchez para apoyarse en el independentismo con tal de sobrevivir en La Moncloa. «¿Qué es eso del conflicto político en Cataluña? ¿Qué conflicto tienen los que van escoltados?», ha dicho, contundente.

Casado, que ha acusado a Sánchez de «mentir impúdicamente» para sacar adelante su gobierno con Podemos, ha enfrentado al socialista con la realidad de un gobierno catalán «en abierta rebeldía», en alusión a la negativa de Quim Torra a aceptar la destitución ordenada este viernes por la Junta Electoral Central.

«Un Gobierno contra el Estado»

En este punto, ha instado al líder del PSOE a requerir a Torra el cumplimiento de «sus obligaciones constitucionales» y «si no las acata» a «activar de inmediato el artículo 155», para lo que ha ofrecido sus senadores. En caso contrario, ha avisado a Sánchez, «podría incurrir en prevaricación». «Actuaremos contra usted con la misma firmeza que contra Torra», ha advertido Casado.

«Ni se reconoce a sí mismo y ya es decir», ha ironizado el líder del PP, recordando al socialista todas las ocasiones en que afirmó que no pactaría con el independentismo. Incluso, que se refirió a Torra como «el Le Pen español».

El líder del PP ha sacado los colores al candidato llevando a la tribuna su anterior rechazo al pacto con Podemos. Y a Iglesias, recordándole las críticas contra quien ahora compartirá La Moncloa. «Los españoles se merecen un gobierno que no les mienta, decía Rubalcaba, aplíquese el cuento», ha resuelto finalmente. «Es un presidente ‘fake’», ha apostillado el dirigente ‘popular’.

Casado ha acusado a Sánchez de convocar una investidura «clandestina» y de conducir a España a la incertidumbre con su ansiado acuerdo con Podemos. «Esto es lo que quería y lo que tiene. No ha ofrecido nada, nunca, a nadie», ha reprochado, avisando que Sánchez «podía gobernar en solitario con el apoyo externo del PP con nueve pactos de Estado que hubieran traído una legislatura exitosa».

«Blanqueadores de batasunos»

En su lugar, le ha acusado de tejer «un Gobierno contra el Estado», pactando con «blanqueadores de batasunos y comunistas, asesores de dictadores bananeros».

Un Ejecutivo, ha opinado Casado, que será «el más radical de nuestra historia democrática». Pero, ha añadido también, «el problema no es Podemos, ni ERC ni Bildu, el problema es usted, que les ha dado carta de naturaleza haciéndoles socios de la gobernabilidad del país».

«Se ha convertido en el líder de la coalición que quiere acabar con la España constitucional tal como la conocemos», ha añadido en su sólida intervención.

Ante ese escenario, el líder del PP ha prometido ser «dique de contención conta cualquier intento de mutación constitucional por la puerta de atrás».

«Usted podrá dañar nuestra nación, pero no conseguirá acabar con ella», ha advertido a Sánchez. «Usted negocia con los que atentan contra la democracia. Y los españoles, que hemos conquistado nuestra libertad a pesar de ustedes, seguiremos conquistándola contra ustedes». «Cataluña seguirá siendo España, tierra de libertad», ha añadido.

Tensión con ETA

En su réplica, Pedro Sánchez ha mendigado al PP «trece abstenciones patrióticas». «Si el panorama es tan terrorífico como dice usted, ¿por qué no se abstiene?», le ha insistido quien, en su día, abandonó su escaño en el Congreso para no abstenerse ante Mariano Rajoy.

El socialista ha volcado un tono altivo en su respuesta al líder de la oposición, acusando incluso a Casado de tener un interés en no apoyarle como presidente. También ha insistido en los resultados electorales y se ha amparado en que «la composición del Parlamento no la hemos elegido nosotros», como si ello justificase sus cesiones al separatismo.

«Dicen que les duele España pero lo que realmente les duele es no gobernar España», ha opinado Sánchez.

Uno de los momentos más encendidos se ha producido cuando el líder del PSOE ha afirmado que fueron el ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero y el entonces ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quienes acabaron con ETA.

La diputada del PP, Teresa Jiménez-Becerril, hermana de Alberto Jiménez- Becerril, asesinado por la banda en 1998, ha abroncado a Sánchez que «ahí tiene sentados a los herederos de ETA», y la bancada ‘popular’ se ha levantado a aplaudirle, mientras la presidenta del Congreso, la socialista Meritxell Batet, le advertía: «Absténgase de comentarios en voz alta». Pedro Sánchez contará en su investidura con la abstención de Bildu. 

La tensión también ha levantado al hemiciclo cuando Casado ha espetado a Sánchez:  «Lecciones de corrupción a mí ninguna, ni a este partido», a lo que el socialista ha respondido, con ironía: «Estamos de acuerdo, lecciones de corrupción del PP, ninguna».

La bancada del PP se ha levantado entonces en gritos contra el candidato: «¡ERE, ERE, ERE!», en alusión a la mayor trama de corrupción de la historia de España, y por la que han sido condenados, entre otros, los ex presidentes socialistas Chaves y Griñán. En su intervención, Sánchez evitó cualquier referencia al caso.