Así persiguió la Fiscalía de Sánchez al conseller balear del PP ahora absuelto

El ex conseller de Turismo del PP en Baleares Carlos Delgado, cuya absolución en el caso Calanova por parte de la Audiencia Provincial se conoció este jueves, ha valorado tras el fallo que «los jueces han puesto en su sitio a la Fiscalía de Sánchez». Así lo ha señalado en declaraciones a OKDIARIO, recordando el papel determinante que jugó en la instrucción la entonces fiscal Anticorrupción Laura Pellón, que fue premiada por Pedro Sánchez con un cargo en la Fiscalía europea en 2021 a los «seis días» de firmar la acusación contra él. El 10 de mayo de 2021 Pellón firmó este escrito, y el 16 de mayo tomó posesión del cargo de fiscal europea delegada.

«He estado señalado durante 8 años por no haber hecho nada», denuncia el ex integrante del Gobierno balear (2011-2013) que presidió José Ramón Bauzá. Fue en 2017 cuando resultó imputado.

El ex alcalde de Calviá (2003-2011) advierte además del riesgo que supone la reforma que pretende ahora el Gobierno de Sánchez para dejar la instrucción sólo en el Ministerio Público, apartando a los jueces. «La Fiscalía actuó contra mí sin ningún indicio de nada», rememora. El que fuera responsable de Turismo, ahora absuelto tras ser acusado de irregularidades en la adjudicación del Puerto de Calanova en 2013, se enfrentaba a un año y nueve meses de prisión y a una multa de 1,1 millones de euros por tráfico de influencias y prevaricación.

En este contexto, Delgado incide en que la fiscal Laura Pellón fuera ascendida por Sánchez a un puesto en Europa justo tras firmar su acusación. Al igual que ella, lo fueron otros miembros del Ministerio Público habían puesto en la diana a otros cargos del PP. Fue en el mes de abril de 2021 cuando el entonces ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, hoy magistrado del Tribunal Constitucional, designó a los fiscales europeos delegados que compondrían el equipo de Concepción Sabadell, ex fiscal de la Gürtel. Cuatro de esas siete personas elegidas actuaron contra el PP o dirigentes de este partido en diversas causas, como el caso de Pablo Ruz, María Elena Lorente, Gloria Yoshiko Kondo y la propia Laura Pellón Suárez de Puga.

Asimismo, Carlos Delgado califica también de «lamentable» la instrucción que realizó el juez Íñigo Ares González y alude a una vulneración de derechos que le llevó a pedir amparo -sin éxito- al Tribunal Constitucional que preside Cándido Conde-Pumpido.

A ello se une que durante la investigación, como publicó OKDIARIO, hubo dos guardias civiles de la Policía Judicial de Palma que llegaron a intimidar a la ex mujer del ex conseller del PP para intentar incriminarle.

De hecho, el pasado diciembre durante el juicio, la ex mujer del ex conseller de Turismo testificó que días después de prestar declaración  ante el Juzgado de Instrucción nº 3 de Palma y estando en el Centro Comercial Porto Pi, recibió una llamada de uno de estos guardias civiles para decirle que él y un compañero querían tener una entrevista con ella, ello en plena instrucción del caso Calanova.

Como contó este periódico, los agentes reprocharon a la ex mujer de Delgado que hubiera sido muy tibia en la declaración contra el ex conseller ante el Juzgado de instrucción. Le dijeron también que Delgado le había sido infiel con una persona a la que identificaron por su nombre y lugar de trabajo.

También lamenta el ex responsable de Turismo del Gobierno de Baleares que el fiscal Juan Carrau mantuviera el mismo posicionamiento que Laura Pellón, a la que reemplazó en la causa, solicitando también un año y nueve meses de cárcel. «Este señor llegó a decir que ‘pensaba que había elementos para pensar’ que existían indicios contra mí», apunta, no dando crédito todavía.

«No tenía obligación»

Durante el juicio, Carlos Delgado negó haber maniobrado para favorecer a un abogado amigo y socio suyo en la adjudicación del puerto deportivo de Calanova (Palma). «Tenía amigos en todas las empresas náuticas», aseguró.

Precisamente, a preguntas del fiscal anticorrupción Juan Carrau, el ex conseller manifestó que en el momento de la adjudicación del concurso allá por 2013, supo que su abogado Carlos Gelabert -a quien acababa de conocer y con quien sólo mantenía una relación profesional, ya que le estaba llevando un proceso de divorcio- había pensado presentarse a la adjudicación del puerto deportivo de Calanova porque tenía vinculación con el mundo de la náutica. «No tenía obligación de abstenerme», recalcó Delgado en relación a su participación como conseller en el procedimiento.

El origen de este caso estuvo en una querella presentada en enero de 2017 contra Carlos Delgado y otras personas por Alfonso Robledo, presidente de la Federación Empresarial de Restauración de las Islas Baleares y de la Asociación Mallorquina de Cafeterías, Bares y Restaurantes, por la adjudicación de la gestión privada del puerto Calanova, en la costa de poniente de Palma.

La sentencia conocida este jueves también absuelve a los demás acusados: el ex secretario general de la Consellería de Turismo Joaquín Legaza; los empresarios Felipe Elvira y Juan Birlanga, y el abogado Xisco López Hinojosa.