El nuevo responsable de discurso de Podemos se declara proetarra y defiende a Chávez
Pablo Iglesias empieza a dar los primeros pasos para marcar el nuevo discurso de Podemos. Tras su victoria en Vistalegre, el líder de Podemos quiere imprimir un giro definitivo al partido, apostando por argumentos más radicales. En vistas a ese objetivo, ahora prioridad para Iglesias, el secretario general ha encargado la construcción del mensaje a quien ya era uno de sus asesores en el Congreso, Pedro Antonio Honrubia.
La designación no es ni mucho menos casual. Miembro del SAT-Sindicato Andaluz de Trabajadores- y licenciado en Filosofía, Honrubia acredita un largo historial de polémicas afinidades y declaraciones, como constatan numerosos artículos en la web de izquierda radical ‘Kaosenlared’, que él mismo impulsó.
En ella defendió, por ejemplo, que Podemos «controlase» alguno de los ministerios clave, como Defensa o Interior, además del CNI, ya que ello le permitiría «ejercer cierto contrapoder contra cualquier intento golpista o similar –mediático, policial o militar».
Tampoco tuvo reparos en mostrar abiertamente su rechazo a la Iglesia católica. Defendió que los cristianos «se vayan a una isla desierta y se hundan con ella» y pidió la retirada de crucifijos de las escuelas porque «la cruz no es un símbolo de libertad y vida sino de opresión y muerte”.
Además, no dudó en definirse como “rojo separatista”, con simpatía por la izquierda abertzale. «Si fuera catalán votaría a las CUP», admitió también.
En otra ocasión, cargó contra el Ejército, la Policía Nacional y la Guardia Civil en el País Vasco, a quienes denominó «fuerzas de ocupación en las tierras vascas». Criticó la detención de etarras y, tras el comunicado de ETA anunciando el cese de su actividad armada aseguró que el “escenario de paz” no existía pues “el estado español y francés seguían con la persecución y el encarcelamiento de militantes de ETA y de las demás organizaciones izquierda abertzale tradicional”.
Entonces, añadió que a los vascos “les quedaba mucho aún por sufrir a consecuencia de la violencia policial, militar, judicial, política e incluso constitucional española, antes de alcanzar sus derechos como pueblo”.
«Apoyo a Chávez»
Honrubia ha declarado también sus simpatías hacia el régimen chavista y se ha mostrado partidario de la detención de los opositores. “Yo sí apoyo a Venezuela y defiendo la detención del alcalde golpista de Caracas Antonio Ledezma”, se podía leer hace unos meses en su perfil de Facebook.
En un artículo, en 2015, defendía que «cualquier estado del mundo tendría presos a gente como Leopoldo López o Antonio Ledezma y otros muchos más, si hicieran en ese Estado lo que estos señores intentan hacer y han hecho en Venezuela. En algunos, estarían ya con ropa naranja a la espera de ser ejecutados por golpistas». En él, calificaba a los detenidos como «un cáncer para la sociedad». «Hay que extirparlo, sea de la manera que sea», añadía.
Su afinidad con el chavismo viene de lejos. Ya en 2011, clamaba sin tapujos: «Apoyo a Chávez como cabeza visible de un proceso revolucionario, apoyado a su vez por un pueblo, el venezolano, que se cansó del saqueo perpetuo al que estaba sometido por el imperialismo, y dijo basta».
«Apoyo a Chávez porque su proceso revolucionario ha devuelto la ilusión y la sonrisa al pueblo venezolano», continuaba.
Podemos «a la ofensiva»
En su último artículo, Honrubia ya da pistas de hacia donde dirigirá el nuevo discurso de Podemos. Un partido, defiende, que debe plantear una «batalla a vida o muerte» contra el «régimen» que, dice, representan los viejos partidos.
«Debemos ser oposición a todo un modelo político con sus diferentes aristas, a todo un “régimen” que actúa en bloque contra el avance de cualquier alternativa como la que representa Podemos, y no conformarnos con ser oposición», se puede leer en el artículo ‘¿Un Podemos para tiempos de normalidad o un Podemos útil y a la ofensiva que sea capaz de hacer frente a los planes restauradores del régimen?’.
«Para eso nacimos y eso es lo que de espera de nosotros, no el convertirnos en un partido más que piensa primero de todo en esa conservadora y peligrosa clave de “no asustar a mi vecina de clase media con unos ahorrillos en el banco” (¿le hemos robado acaso algo a alguien?)», continúa.
Firme defensor de la unidad de la izquierda, Honrubia no dudó incluso hace años en cargar contra el «ego» de su ahora ‘jefe’ por negarse a una alianza con Izquierda Unida.
Hasta ahora, Honrubia formaba parte de la llamada «unidad de análisis de la secretaría general», dependiente del grupo parlamentario.