Reducción de jornada y subida del salario mínimo: los nuevos derechos laborales que llegan a España

El Gobierno de España avanza en su compromiso de reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales en cómputo anual, con el objetivo de implementar esta medida plenamente antes del 31 de diciembre de 2025. Aunque el proceso legislativo podría enfrentar ciertos obstáculos, la ministra Yolanda Díaz ha reiterado que esta reducción es un acuerdo clave con los sindicatos y marcará un hito en los derechos laborales de los trabajadores. Junto con la reducción horaria, se implementará una reforma en el sistema de registro horario, que será obligatorio en formato digital e interoperable, extendiéndose también a las trabajadoras del hogar.

Este registro deberá estar disponible para su consulta por parte de la Inspección de Trabajo y los representantes de los empleados, quienes podrán acceder de manera remota. Para garantizar el cumplimiento de esta medida, las sanciones por infracciones relacionadas con la jornada laboral serán más estrictas, con multas que podrían alcanzar los 10.000 euros por cada empleado afectado. Esta normativa busca promover la transparencia en la jornada laboral y proteger los derechos de los trabajadores.

Reducción de la jornada laboral y SMI

El ministerio de Trabajo y Economía Social, liderado por Yolanda Díaz, ha alcanzado un acuerdo con los principales sindicatos para reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales. Este cambio, que no contará con el respaldo de la patronal, busca implementarse antes del 31 de diciembre de 2025. Aunque la medida aún debe pasar por el Congreso para su aprobación definitiva, el objetivo es garantizar que las empresas adapten sus convenios colectivos antes de esa fecha.

La nueva normativa beneficiará a más de 12 millones de empleados con jornadas de 40 horas semanales, especialmente a los sectores más vulnerables, como el personal de limpieza y los trabajadores en supermercados. Aquellos que actualmente trabajan jornadas inferiores no verán alteradas sus horas, pero sí tendrán derecho a un incremento salarial proporcional. Además, quienes tienen contratos parciales de 37,5 horas o más pasarán a tener contratos a jornada completa automáticamente, ampliando sus beneficios laborales.

El Salario Mínimo Interprofesional (SMI) es un elemento esencial en la política laboral de España. En 2025, podría ser de 15.876 euros anuales, repartidos en 14 pagas, lo que equivale a 1.134 euros mensuales (1.323 euros con pagas prorrateadas). Esta cifra, además de proteger el poder adquisitivo, asegura que la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales no afecte los ingresos, ya que el SMI por hora trabajada aumentará proporcionalmente, alcanzando los 9,75 euros por hora.

Además de la reducción de la jornada, se implementará un sistema de registro horario digital obligatorio para todas las empresas. Este registro permitirá identificar las horas ordinarias, extraordinarias o complementarias trabajadas y deberá conservarse durante cuatro años. Sindicatos, empleados e Inspección de Trabajo tendrán acceso a esta información, fomentando así la transparencia y el cumplimiento de la normativa laboral.

La reforma no ha estado exenta de controversias. Las organizaciones empresariales advierten sobre los altos costes que podría implicar para las pequeñas y medianas empresas, las que más empleo generan en España.

Mesa de diálogo social

El Ministerio de Trabajo convocará esta semana a los actores sociales para discutir la subida del SMI de 2025, en una mesa de diálogo que incluirá a los sindicatos CCOO y UGT, así como a las patronales CEOE y Cepyme. A pesar de que el Gobierno tiene la última palabra, la vicepresidenta Yolanda Díaz ha subrayado que la subida debe cumplir dos objetivos clave: proteger el poder adquisitivo de los trabajadores y avanzar hacia un SMI que represente el 60% del salario medio en España.

Los sindicatos abogan por un incremento del 6%, lo que elevaría el salario mínimo por encima de los 1.200 euros mensuales. Este aumento se enmarca dentro de una serie de subidas que han transformado el SMI, el cual ha aumentado un 54% en los últimos cinco años. Sin embargo, las discrepancias internas en el Gobierno, como las declaraciones de Carlos Cuerpo, generan tensiones.

Desconexión digital

A partir de 2025, los trabajadores tendrán derecho a desconectar digitalmente, una medida que forma parte de la reforma laboral que también incluye la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales. Éste nuevo derecho busca garantizar un equilibrio entre la vida personal y profesional de los empleados, evitando la sobrecarga mental que genera la conexión constante con el trabajo. Con esta reforma, las empresas estarán obligadas a respetar este derecho y no podrán ponerse en contacto sus trabajadores fuera del horario laboral, ni exigirles responder correos o llamadas.

La desconexión digital, que se establece como un derecho fundamental de los empleados, se regula en la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantías de los Derechos Digitales. A partir de la aprobación definitiva de esta medida, las empresas que no la cumplan se enfrentan a sanciones severas. Cualquier intento de contacto fuera de horario será considerado horas extra, lo que, según la normativa vigente, puede acarrear una multa de hasta 7.500 euros por una infracción de carácter grave.