La receta económica independentista: veto a las empresas del Ibex, banco público y una ‘SEPI catalana’
Las recetas económicas propuestas por los partidos independentistas de cara a las elecciones autonómicas en Cataluña de este domingo apuntan a nuevos conflictos, tanto con Europa como con el Gobierno central y hasta con las grandes empresas del país.
Lejos de una vuelta a la normalidad tras una década de proceso de ruptura unilateral, independentistas de izquierda y derecha proponen entre otras cosas un banco público, una moneda local y hasta vetar a las empresas del Ibex 35 en las adjudicaciones de la Generalitat. Incluso las propuestas del Partido Socialista de Cataluña (PSC) de Salvador Illa generarán conflictos con el resto del país, en lugar de abrir una etapa de estabilidad.
Pere Aragonés (ERC)
Las encuestas dan a ERC como posible ganador de las elecciones del domingo, aunque sin mayoría absoluta y seguido muy de cerca por JxCat y el PSC. El partido que lidera Pere Aragonés quiere poner en marcha «un gran fondo público-privado que permita al Govern invertir y tomar decisiones en la participación de empresas con elevado potencial de futuro», según explica en su programa. En definitiva, una institución a imagen y semejanza de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que participa en algunas compañías del país.
Además, ERC propone crear un banco público autonómico a partir del Instituto Catalán de Finanzas (ICF) y una «moneda complementaria de país» junto con los Ayuntamientos para impulsar el comercio local. A esto hay que añadir un nuevo impuesto al comercio electrónico, ampliando la lista de tasas que ya pagan los ciudadanos de esta región, que ya es de los más altos del país. También habla de ampliar la economía colaborativa.
Laura Borrás (JxCat)
Pese a ser un partido conservador, la formación que presenta como candidata este domingo a Laura Borrás y que dirige desde Waterloo en la sombra Carlos Puigdemont -fugado de la justicia española-, propone nada menos que vetar a las empresas del Ibex 35 de la contratación pública de la Generalitat. El partido de Borrás propone primar a las compañías catalanas hasta que se haga efectiva la independencia.
Además, la formación de Puigdemont quiere aumentar la soberanía de gestión económica de Cataluña, accediendo directamente al MEDE al margen de España y emitiendo bonos en el mercado. Hasta pondrá en marcha una agencia espacial catalana. Dará luz verde también a nuevos impuestos verdes y a las plataformas como Amazon.
Dolors Sabaté (CUP)
Las propuestas económicas de los radicales izquierdistas de la CUP podrían tener alguna importancia si su voto es necesario para que el independentismo sume mayoría absoluta. Lo normal es que eso no suceda, sobre todo porque la CUP no entraría en un Ejecutivo con un partido de derechas como JxCat.
Pero, si son imprescindibles para gobernar, podrían imponer alguna de sus medidas económicas. Éstas pasan por imponer una nueva tasa del 3% a las empresas que registren más de cinco millones de beneficios, además de un nuevo impuesto para grandes patrimonios para financiar los gastos del coronavirus: un 1% para patrimonios de 1 a 10 millones de euros, un 2% para patrimonios entre 10 y 50 millones, y un 3% para los que superen esa cantidad. Propone también un banco público.
Salvador Illa (PSC)
La victoria del candidato socialista no va a estar exenta de conflictos, si se cumplen sus propuestas programáticas para este domingo electoral. Illa propone que se condone parte de la deuda que tiene Cataluña con el Estado con el argumento de que el sistema de financiación autonómico -que pactó José Luis Rodríguez Zapatero con el ex presidente autonómico catalán Artur Mas y el PP votó en contra- ha sido perjudicial para la región. A esa condonación se sumarían otras regiones que también hayan sido perjudicadas por el sistema. El 80% de los más de 78.000 millones de deuda que tiene Cataluña es con el Estado.
Además, el candidato socialista -que ha criticado a Madrid por su política de bajos impuestos acusándola de dumping- quiere crear una Agencia Tributaria conjunta con el Gobierno central para gestionar de manera conjunta y bilateral los impuestos que se recaudan en Cataluña. Una especie de pacto fiscal, que ya propuso Mas a Mariano Rajoy en 2012 -en plena crisis económica mundial-.
Alejandro Fernández, Carlos Carrizosa e Ignacio Garriga (PP, C´s, Vox)
Por su parte, los tres partidos que se sitúan ideológicamente al centro y la derecha apuestan en sus programas económicos por la reducción de impuestos. Alejandro Fernández (PP) bonificará el 99% del Impuesto de Sucesiones, como ocurre en Madrid, y elevará de 500.000 a 700.000 euros el mínimo exento para pagar el de Patrimonio. También eliminará el recientemente aprobado impuesto a las bebidas azucaradas y otros propios de la región, además de limitar los organismos políticos al servicio de la independencia.
Vox ha presentado un decálogo de ideas entre las que destaca la reducción de la presión fiscal para los catalanes y el cierre de la cadena de televisión autonómica, TV3. Por último, Ciudadanos, que ganó las pasadas elecciones, reducirá también la carga impositiva actual en Cataluña y acometerá una rebaja de impuestos para las rentas más bajas.